Más de 30.000 firmas han sido entregadas hoy en la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Cádiz para reclamar la apertura de fosas de diversos cementerios de la provincia dentro de las investigaciones abiertas sobre el supuesto robo de bebés para adopciones irregulares.

Las 32.688 firmas, recogidas por los afectados gaditanos aglutinados en la Asociación Nacional de Adopciones Irregulares (ANADIR), piden también a la fiscalía pruebas de ADN gratuitas, otra prueba que facilitaría la investigación sobre estos casos, y la constitución de un banco con esta información.

Jesús Alcina, miembro de la ANADIR residente en Chiclana de la Frontera, ha explicado que la petición de apertura de fosas de los cementerios es la primera que se realiza en España, una iniciativa con la que pretenden averiguar si los féretros en los que supuestamente fueron enterrados los bebés tienen restos humanos o están vacíos "como ya se ha demostrado en varios casos".

La Fiscalía de Cádiz tiene ya en su poder, según Jesús Alcina, unas doscientas denuncias, cifra que aumenta constantemente porque "hoy, mientras estábamos allí, se han presentado seis o siete más".

La mayoría de estas denuncias se refieren a casos ocurridos entre los años cincuenta y ochenta en hospitales como la antigua residencia Zamacola de la capital gaditana, donde las madres daban a luz y, poco después, les decían que su bebé había fallecido, que no podían ver el cadáver y que ellos se encargaban de los trámites del entierro.

Los afectados gaditanos de la ANADIR quieren ahora que se abran las fosas en los que fueron supuestamente enterrados "en unas cajas numeradas" estos bebés, la mayoría de ellos en el antiguo cementerio de Cádiz, aunque también en otras localidades de la provincia.

Es una prueba que "facilitaría la investigación", según el representante de la ANADIR, que también ha reclamado a la fiscalía la realización de pruebas de ADN gratuitas para localizar "a padres que buscan hijos e hijos que buscan a sus padres".

"El ADN es lo más importante de la investigación, porque es lo más concluyente, ahora nos los estamos haciendo a nivel personal, en un laboratorio de Madrid que nos hace un precio especial, pero son más de cien euros, más el viaje, mucha gente no puede pagarlo", explica Jesús Alcina.