Buena parte de los trabajadores de Proasal Salinera de Andalucía se concentró ayer con un grupo de familiares en las instalaciones que esta empresa tiene en la carretera de La Algaida para reclamar el pago de las nóminas pendientes y oponerse al posible Expediente de Regulación de Empleo (ERE) anunciado por la dirección de esta entidad privada.

El portavoz sindical de la plantilla, Ricardo Ces (UGT), que cifró en más de 60 el número de manifestantes para destacar el seguimiento de la protesta, aseguró que la firma adeuda a los empleados, como mínimo, las tres últimas nóminas, habida cuenta de que en el personal hay diferentes situaciones particulares al respecto. En cuanto al posible ERE, afirmó que no está justificado porque Proasal "tiene beneficios y es viable", remitiéndose a la información que dijo haber recibido de la propia empresa.

Los trabajadores se reunirán, de nuevo, hoy mismo para preparar más movilizaciones. "Iremos poco a poco, pero no descartamos la huelga", comentó Ces.

El Partido Comunista de Andalucía (PCA) mostró ayer públicamente su respaldo a la plantilla criticando "la actitud intimidatoria y de amenaza que mantiene la empresa", en alusión al ERE. Según esta formación política, "estamos ante uno de los mayores ataques de la patronal al tejido industrial y productivo de Sanlúcar, así como a los derechos y las conquistas de los trabajadores".

El PCA aseveró que este conflicto se suma a "la sangría de despedidos y de destrucción de empleo en la ciudad", citando las Bodegas Pedro Romero y el sector vitivinícola. Pidió a la alcaldesa, Irene García, que intervenga en apoyo de los trabajadores.