La memoria anual de la Asociación de Grandes Industrias del Campo de Gibraltar (AGI) dedica cada año un amplio apartado para analizar el desempeño medioambiental de las factorías. Como resumen general, la optimización de los procesos productivos permitió durante 2014 reducir el consumo de agua y energía pese a que las cotas de producción crecieron.

Así, en 2014 las empresas asociadas consumieron un 6,3% menos de agua para su funcionamiento. En total, emplearon 472,4 hectómetros cúbicos, con una cuota del 98,5% de agua no potable y una tasa de reutilización que se incrementó en un 2,7% respecto al año precedente hasta alcanzar el 35,7% de la que entra en la red de las industrias.

En cuanto a la energía eléctrica, el consumo medido en gigavatios hora cayó un 11,7%, de los 2.221 gigavatios consumidos en 2013 a 1.961 en el pasado ejercicio. Un dato que encuentra su explicación en que se invirtieron 27,2 millones de euros sólo el año pasado para mejorar la eficiencia energética, más otros 19,7 en el precedente. En total, el gasto relacionado con medio ambiente, entre inversiones y operativos, alcanzó los 57,6 millones de euros.

Todo ello tuvo su reflejo en las emisiones de gases -dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno, óxidos de azufre- y partículas, que decrecieron en todos los casos. También cayeron los residuos industriales. El 42,5% de los residuos fueron reciclados, recuperados o destinados a la valorización energética.

El año se saldó, nuevamente, sin expedientes sancionadores por parte de la administración en cuanto a la medición de los parámetros de emisiones. Los datos se monitorizan en continuo, con más de 300 puntos de medición. Las industrias asociadas toman mediciones propias que se complementan con las de la administración regional.