La juez encargada del Juzgado de lo Mercantil de Cádiz, Mª Castillo Mendaro Dorantes, reconoce que no es asumible la carga de trabajo que soporta el órgano judicial para una sola juez y espera que en septiembre se nombre a un sustituto para poder compartirla. Como prueba de ello presenta un ejemplo de la entrada actual de papel: en un mes se han incoado 80 casos acerca de las cláusulas suelo, aparte de las demandas que están en trámite.

La vacante dejada por Nuria Orellana, que acaba de tomar posesión de su nuevo puesto en la Audiencia de Málaga, depende del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y puede tardar unos cinco meses en resolverse, máxime cuando la convocatoria aún no ha salido, según los cálculos de la actual titular. Los vocales territoriales de Andalucía manifestaron en su última visita a la Audiencia gaditana la semana pasada que la intención era dejar el asunto resuelto antes de que se produjera la renovación del órgano. Mientras tanto, será el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía el responsable de nombrar un juez sustituto, para lo que ya se ha comprometido ante la actual titular del Juzgado, que así lo solicitó mediante el presidente de la Audiencia, Manuel Estrella.

Se da la circunstancia de que Mª Castillo Mendaro entró a formar parte del Juzgado de lo Mercantil en abril de este mismo año por comisión de servicios, ante el incremento de los procesos judiciales que ha venido asumiendo este juzgado con la actual crisis. Los concursos no han parado de crecer desde el año 2004, así como el número de asuntos incoados. Incluso en el presente 2013, que pensaban que buena parte de los casos susceptibles de entrar en concurso ya lo habían hecho, las cifras siguen aumentando. Actualmente se encuentran en trámite más de 600 concursos. La evolución de los datos es simplemente espectacular, pasando de 5 concursos en todo 2004 a 18 en 2007, 64 en el año 2008, 121 en 2010, hasta los 167 del año pasado. El primer semestre del presente año se ha cerrado con 90 concursos incoados, por lo que de continuar la tendencia se cerrará el año con una cifra superior a los periodos anteriores.

El Juzgado de lo Mercantil de Cádiz se creó en 2004 con cinco funcionarios en plantilla. El incremento del volumen de trabajo determinó la adopción de diversas medidas de refuerzo que comenzaron en 2007 con tres nuevos funcionarios. En 2009 volvió a incrementarse la plantilla hasta los once actuales, aunque desde octubre de ese mismo año hasta enero de 2010 fue necesario que realizaran horas extraordinarias por la carga existente. Finalmente, en marzo de 2011 el TSJA nombró un juez de refuerzo de adscripción territorial, el Ministerio de Justicia una secretaria de provisión temporal y la Delegación de Cádiz otros dos funcionarios de refuerzo. Desde abril, la juez Mendaro se encuentra en comisión de servicios por periodo de un año, "se hizo con vocación de prorrogarlo" admite, pero le crea incertidumbre que la renovación del CGPJ cambie de postura si se profundiza en la dinámica de recortes.

"En los servicios de justicia es donde menos inversión se ha hecho desde la Administración Pública", reflexiona la juez, que sentencia que "hace falta otro Juzgado de lo Mercantil en Cádiz, sin duda". Reconoce que hay algunos concursos que aunque duren eternamente no dan mucho trabajo y otros con los que pasa todo lo contrario. La crisis es el detonante para pedir otro juzgado, pero señala que hay carga de trabajo para tal petición más allá de la coyuntura económica presente y que el actual estaría aún así atascado mucho tiempo aunque se amplíe. "Ahora me encuentro con todo el juzgado, que es inabarcable". De los once funcionarios, nueve se encargan de los concursos, mientras que los otros dos llevan el resto de procedimientos mercantiles, por lo que esa parte también se satura. "Si no se ha hundido el Juzgado es porque ha tenido magistrados, funcionarios y refuerzos magníficos porque es el Juzgado con más carga de trabajo de la provincia", concluye Mendaro, que afirma que un funcionario ha estado durante un largo periodo dedicado en exclusiva a uno solo de los procesos más complejos por la cantidad de incidentes concursales que genera.

La juez manifiesta que el Juzgado de lo Mercantil necesita una "dedicación constante, te hace trasnochar y trabajar sábados y domingos". Las vistas orales se alargan porque son procesos complejos por lo que apenas puede trabajar en su despacho. "El resto te lo llevas a casa".

Otro aspecto que le preocupa a la juez es el grado de especialización del posible sustituto. "Es muy difícil que haya estado antes en mercantil", aunque aún así reconoce que se necesita a alguien que al menos vaya apagando los fuegos más importantes.

Entre los concursos que tramita el Juzgado de lo Mercantil de Cádiz se encuentran cinco concursos de la denominada Nueva Rumasa, el de Delphi, el Cádiz Club de Fútbol o el Xerez Deportivo SAD. Mención especial merecen los cuatro concursos de sociedades del Grupo Jale, calificado como el de mayor pasivo de Andalucía y uno de los de mayor pasivo en España y que afecta a establecimientos hoteleros como los del Hotel Incosol de Marbella, el Hotel Monasterio y Hotel Duques de Medinaceli en El Puerto, el Hotel Palacete Mirador de Córdoba o el Hotel Colón Costa Ballena de Rota. Además, a este órgano le corresponden los asuntos más variados, que incluyen sociedades, propiedad industrial intelectual, competencia y los embargos de buques marítimos, como único juzgado con especialidad en la provincia y que supone procedimientos de tramitación urgente.

La necesidad de un segundo juzgado de lo mercantil para la provincia de Cádiz no es nueva. En mayo de 2011, apuntan desde el propio Juzgado, el servicio de Inspección del CGPJ ya aconsejó la creación de un juzgado bis, que estaría compuesto además de por el juez de adscripción territorial, por un secretario, dos gestores, dos tramitadores y un funcionario de auxilio judicial, si bien no ha llegado nunca a constituirse.