La Diputación acogió ayer el sencillo acto que como es habitual suele celebrarse con motivo del Día de la Constitución, el 6 de diciembre, aunque unos días adelantados. Los discursos de José Loaiza, presidente de la institución provincial, y Francisco Calero, subdelegado del Gobierno en Cádiz, y los himnos de España y Andalucía, esta vez de música grabada y no con el cuarteto Manuel de Falla tocando como otros años, ocuparon el Salón Regio durante el rato dedicado al XXXIII Aniversario de la Constitución Española.

Ambos aprovecharon artículos de la actual carta magna y de la Constitución de 1812 promulgada en Cádiz para vertebrar sus discursos. Loaiza lo hizo para reivindicar la labor de la institución que preside, las diputaciones, que precisamente surgieron de Las Cortes gaditanas, que en breve celebran su Bicentenario. "Son principales para la organización de la provincia, es nuestra carta magna la que le da importancia que algunos han querido poner en duda desde el conocimiento de esta institución al servicio del ciudadano", manifestó Loaiza, que alabó también a la "sociedad madura" que se ha conseguido en el país en estos 30 años tras "una historia que no ha sido fácil".

Por su parte, Calero, trajo a colación un artículo de 1812 sobre el "amor a la patria", parecido al actual del "derecho y el deber de defender a España", Y lo hizo para que no se olvide "ese compromiso de devoción" ante una grave crisis, de duración y consecuencias imprevisibles". "Afrontar este trance y superarlo con éxito, sólo es posible con el común esfuerzo y entrega de absolutamente todos nosotros", afirmó el actual subdelegado del Gobierno, que tampoco se olvidó de la madurez de un país más de 30 años después y tras unas elecciones cuyo resultado de alternancia "sólo cabe interpretar como síntoma de normalidad y buena salud constitucional".

En el Salón Regio se pudo ver a diputados provinciales, delegados provinciales, representantes de las fuerzas de seguridad y militares o de empresarios y sindicatos.