El Salón de los Vinos Nobles ha superado la prueba de fuego del cambio de organización en un contexto de drásticos recortes, y desde ese punto de vista se puede decir que la séptima edición de la feria jerezana ha sido un éxito porque, salvo 'hecatombe', Vinoble volverá dentro de dos años a su habitual cita en El Alcázar.

Hecha la salvedad, no hay que olvidar que el trabajo desarrollado en las seis ediciones anteriores dotan de una base sólida al Salón, ya consolidado, testigo que ha recogido la nueva organización, que se ha encontrado con un evento ya rodado para recoger el testigo e incorporar mínimos cambios que, en un año especialmente difícil, garanticen su pervivencia.

A los ojos del nuevo comisario del Salón, Pancho Campo, las modificaciones incorporadas -aunque leves- han supuesto una mejora pese a la crisis global, en particular en el impulso de la faceta comercial del salón y de su internacionalización, las dos principales bazas en las que se ha apoyado la nueva dirección ejecutiva del Salón, a cargo de The Wine Academy, bajo la atenta mirada de la organización técnica que ostenta el Ayuntamiento.

Sobre la base de un evento único en su concepción tanto por su especialización en los vinos generosos, licorosos y dulces especiales como por el escenario del conjunto monumental de El Alcázar en el que se desarrolla, méritos que cabe atribuir al anterior comisario de Vinoble, Carlos Delgado, a su sustituto Pancho Campo y al Ayuntamiento cabe reconocerle su capacidad para que no se eche en falta la mano del padre de la iniciativa, como subrayan desde el primero hasta el último de los expositores, pese a las sensibles bajas registradas en la presente edición.

Sin duda, el calor sofocante registrado en los días de celebración de Vinoble ha sido un handicap para la nueva organización, dificultad frente a la que el comisario y responsable de The Wine Academy entiende que hay soluciones sin necesidad de cambiar ni la fecha de celebración ni, por supuesto, el escenario en el que reside gran parte del éxito de la cita.

"Hay formas para compensar el calor como se hizo en la Expo 92 -en alusión a los difusores de agua-, pero todo el mundo que viene a Jerez en esta época del año sabe que no va a pasar frío", indicó en el balance provisional de Vinoble Pancho Campo, quien puntualizó que "yo no cambiaría ni de fecha ni de sede".

El comisario del Salón explicó igualmente que en la presente edición han prestado especial atención a divulgar el carácter internacional de un salón que muchos pensaban que estaba exclusivamente dedicado a vinos españoles y a reforzar la presencia de compradores y prensa especializada de otros países, aunque quizás, admitió, descuidando la de profesionales de origen nacional por la especial incidencia de la crisis en las ventas de vino en el país.

En respuesta a las preguntas de los periodistas, el comisario también se refirió a los 'cueles' en Vinoble, fundamentalmente cavas que no se ajustan a los parámetros de vinos generosos, licorosos y dulces especiales a los que se ciñe el Salón.

En este sentido, Campo explicó que la idea inicial era que las bodegas de cava vinieran a la cita exclusivamente con espumosos dulces de postre y no con toda la gama que abarca los brut nature y los demi-sec, hecho que analizarán para adoptar medidas, al tiempo que se refirió a la presencia en el salón de vinos australianos en los que se mantiene el uso de las menciones tradicionales fino, oloroso y amontillado, práctica que está en vías de extinción pero que, a día de hoy, sigue siendo legal al no haberse ratificado aún el acuerdo bilateral sobre vinos entre este país y la UE por el que se establecen una serie de restricciones, de aplicación progresiva, para el abandono del uso fraudulento tanto de las denominaciones de origen europeas como de las menciones tradicionales.

La organización esperará unos días para hacer un sondeo entre todos los expositores presentes en el Salón para conocer sus impresiones acerca de la organización, aciertos y errores... así como los contactos entablados y negocios cerrados durante la cita, aspectos sobre los que ofrecerán puntual información en el balance final de Vinoble que realizarán junto a responsables municipales.