Entró en un bar, en Alcalá de los Gazules, y, en el momento en que la dueña se ausentó de la barra para ir al cuarto de baño, se tumbó rápidamente sobre el mostrador, estiró la mano y pudo coger 500 euros de la caja. Y se dio a la fuga. La propietaria, al retornar a la barra, se dio cuenta de lo ocurrido y avisó a la Guardia Civil. Los agentes acabaron deteniendo a un vecino de la localidad con numerosos antecedentes, J.E.R., como supuesto autor del robo.
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