"Ahora que estoy liberado de mis obligaciones laborales pensaba tener todo el tiempo del mundo para difundir el nuevo mensaje del PSA por todos los rincones andaluces, como ya lo he hecho muchas veces. Antes lo podía hacer como secretario y ahora puedo hacerlo como militante. Punto. Tengo ganas e ilusión". Apenas unas 48 horas después de renunciar en el último instante a emprender una nueva andadura al frente del PSA, partido que él mismo maquinó, Pedro Pacheco se frotaba ayer la barbilla ocultando algunas cartas bajo la manga pero deslizando, al mismo tiempo, que no volverá a liderar la formación andalucista, con todo lo que eso implica y conlleva.

Tras el congreso nacional del partido celebrado el pasado sábado en Chiclana, el ex alcalde de Jerez durante 24 años consecutivos reconocía, para acallar rumorología diversa, que su decisión "no ha sido un golpe de efecto, ni fruto de una crisis de confianza en el proyecto, simplemente dije que con otra lista sí, con esta no". "Cuando llegué al congreso y pregunté por la lista, vi en ella a personas que creo que no pueden estar en este proyecto, lo que no quiere decir que estén en el partido", puntualizó con énfasis.

Así las cosas, Pacheco justificó su renuncia al subrayar que "ante la composición de la lista y ciertas actitudes sectarias impropias de un partido del siglo XXI, he dado un paso atrás, diciéndoles que busquen a otro secretario, que estoy completamente convencido de que entre los miembros de la gestora -entre la que se encuentra su segundo espada en Jerez, Juan Román-, gente valiosísima, muy conocidos en el panorama andaluz, habrá alguien", incidió el ya ex dirigente andalucista.

Por el contrario, abundó, "se lo dije muy claro a la gestora: no estaba de acuerdo con la lista, había otra gente más capacitada, más trabajadora, con otro talante muy distinto, capaces de transmitir coherencia a este proyecto del PSA... Ahora espero que no se resienta el partido".

En este punto, y cuestionado por la situación en la que queda tras su "paso atrás" el PSA, Pacheco replicó conciso: "No lo sé". E insistió en que "el tema es preocupante, pero no está en esta parte el resolverlo, al menos no todo en esta parte". "Si la comisión gestora, que debe ser muy provisional, tiene lucidez, debe resolver cuanto antes el problema y recomponer la situación; y buscar una lista alternativa. Si no la buscan, que sea del agrado de todos, tendrán que buscar otro secretario alternativo", aclaró acto seguido, sin despejar en ningún momento muchos interrogantes.

En todo caso, aclaró que la decisión tiene complicada marcha atrás, pues entre otras cosas, "no creo que yo me haya caracterizado en todo este tiempo por ser caprichoso políticamente hablando". "Creo que el PSA que yo quiero, y que queremos mucha gente, debe ser un partido en el que el nacionalismo tenga el mismo peso que el deseo de regeneración, y éste se debe de conseguir con personas en las que confíes dada su actitud y probada eficacia", recalcó vislumbrando algunas líneas del que debería haber sido su nuevo proyecto político.

"Si estamos diciendo que el PSA tiene que ser un partido donde el nacionalismo y la regeneración sean las dos piezas claves, tenemos que obviar y orillar actitudes similares al sectarismo", profundizó, para a continuación insistir en que "en el PSA nuevo, que debía haber salido completo del congreso de Chiclana, debe haber coherencia". "Si decimos que el partido hace un llamamiento a los ciudadanos para que ellos sean protagonistas; si decimos que la política es algo tan importante que no debe estar en manos de los políticos profesionales; y decimos que los problemas de la democracia se arreglan con más democracia, tenemos que ser coherentes", zanjó.

Pese a todo, como se ha dicho, Pacheco dejó claro que no renunciará a seguir defendiendo una "tercera pata" en la región contra el "grave peligro de que se consolide el bipartidismo, la oligocracia que soportan los andaluces".