Agentes de la Guardia Civil han detenido a una persona tras abortar un alijo de 1.650 kilos de hachís cuando pretendían sacar la droga en una embarcación y una furgoneta en la playa de Mangueta, en el término municipal de Barbate.

Según indicó ayer la Guardia Civil en una nota de prensa, los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado domingo, a las 3:40 horas, cuando los guardias civiles que operaban en el Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) detectaron una embarcación navegando sin luces frente a las costas de Barbate y con rumbo hacia la zona de Mangueta. Así, fueron alertadas las patrullas de servicio de Barbate, localizando la embarcación y una furgoneta en un lugar de difícil acceso. La llegada de los primeros agentes hizo que las personas que esperaban el alijo huyeran del lugar, por lo que los guardias civiles aseguraron la zona en espera de refuerzos para rastrear la zona.

El total del hachís incautado arrojó un peso de 1.650 kilos, siendo negativo el resultado de la búsqueda de las personas que podían haber participado en el alijo, dada la oscuridad de la noche y la dificultad del terreno. Posteriormente, con las primeras luces del día, se procedió a realizar la inspección ocular del lugar, embarcación neumática de diez metros de eslora con dos motores de 60 y 25 cv. y de la furgoneta, que se trataba de una Ford Transit.

Por su parte, añadió el comunicado, la furgoneta era propiedad de un vecino de Barbate, encontrándose en su interior las llaves de la misma, además de no presentar signo alguno de haber sido forzada, ni encontrarse denunciada como sustraída. Así, al día siguiente procedieron a citar al propietario de la furgoneta para tomarle declaración, manifestando a los agentes que se la habían sustraído y que el día anterior, con posterioridad al alijo, había presentado denuncia ante la Policía Local.

Por todo ello, el vehículo, la embarcación y la droga aprehendida quedaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de los de Barbate, en unión del propietario de la furgoneta en calidad de investigado, continuando la investigación abierta y no descartándose detenciones.

Por otra parte, agentes de la Policía Nacional y miembros de la Agencia Tributaria han detenido en una operación conjunta con la Dirección Nacional Antinarcóticos de la policía de Ecuador a dos trabajadores de una empresa del Puerto de Algeciras que trataron de introducir 350 kilos de cocaína en España y fueron sorprendidos cuando intentaban descargarla.

Según informaron ayer la Policía Nacional y la Agencia Tributaria en una nota, la droga había sido enviada bajo el método conocido como gancho ciego, consistente en camuflar en el lugar de origen la mercancía ilegal entre sustancia legal. Así, ocultaron seis fardos de cocaína en la parte superior de un contenedor que transportaba cajas de bananas.

En el comunicado, la Policía explicó que las investigaciones comenzaron cuando a través de los canales internacionales de intercambio de información policial los agentes tuvieron conocimiento, por parte de la policía de Ecuador, de que en un contenedor que transportaba mercancía legal desde el puerto de Guayaquil (Ecuador) hasta Turquía, pasando por España, se ocultaba una cantidad indeterminada de sustancia estupefaciente camuflada entre cajas de bananas.

Así, una vez en el puerto de destino o tránsito, la organización criminal destruiría el precinto para sacar la droga y colocaría un duplicado una vez la hubieran descargado. Posteriormente, tras desarrollar diversas actuaciones, los investigadores detectaron varios contenedores susceptibles de portar la cocaína en su interior, averiguando finalmente que en uno de ellos había varios fardos de color negro tapados por varias filas de cajas de bananas.

Así, mientras vigilaban el container, observaron cómo dos trabajadores del puerto de Algeciras lo desprecintaron con la intención de sacar los seis paquetes de droga del interior, meterlos en una furgoneta y emprender la marcha con las luces apagadas. Los dos trabajadores, al ser sorprendidos por los agentes, "intentaron darse a la fuga sin éxito, siendo detenidos", añadió. Por su parte, los 350 kilos de clorhidrato de cocaína que contenían los fardos fueron intervenidos en ese momento.

La operación ha sido llevada a cabo por la Brigada Central de Crimen Organizado de la Comisaría General de Policía Judicial en colaboración con la Unidad de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria de Algeciras y la Dirección Nacional Antinarcóticos de la Policía Nacional de Ecuador, Unidad de Puertos y Aeropuertos.