A Holanda en 1964, para ahorrar para un casa en Chiclana

Pedro Aragón, de Chiclana, no quiso perderse ayer la reunión informativa. Acudió con su esposa, Antonia, también emigrante retornada, y con su hijo, que nació en Holanda, que vino para estar cerca de sus padres y ahora es un desempleado. Pedro tiene dos enfermedades crónicas, es un jubilado por enfermedad, lo que supone que su pensión está exenta de tributar. Sin embargo, no sería extraño que Hacienda le reclamase el pago, ya que en algún caso similar ya ha ocurrido, según ha explicado la asociación de Emigrantes Retornados. Pedro trabajaba en la construcción antes de emigrar. Iba de San Fernando a Cádiz en bicicleta, recuerda de aquellos tiempos en los que "se trabajaba mucho y se cobraba muy poco". Como quería hacerse una casa, en 1964 se fue a Holanda. A base de "sacrificio" ahorró para la casa y para un terrenito en Chiclana. Pedro coincide con otros emigrantes en que lo trataron bien en Heemskerk, donde trabajó en una fábrica de tejas, en una harinera y en una empresa metalúrgica. "Tuvimos dificultades con el idioma pero la empresa nos puso un intérprete". Retornó en 1990. Vino también luego su hijo, Pedro, como él, que trabajaba allí en la misma empresa metalúrgica. "Me arrepiento de haber venido", se lamenta el hijo ante el panorama actual.