Coronavirus en Cádiz

Cádiz capital podría librarse del cierre perimetral el próximo viernes

El Paseo Marítimo de Cádiz el pasado Domingo de Carnaval.

El Paseo Marítimo de Cádiz el pasado Domingo de Carnaval. / Jesús Marín

A Cádiz capital le está costando librarse del cierre perimetral en el que está metido desde que supero la tasa de incidencia de 500 contagiados por 100.000 habitantes. Este viernes ya han normalizado su situación, en cuanto a la salida y entrada a sus localidades, municipios como Jerez, El Puerto, Sanlúcar, y La Línea, mientras que San Fernando y Chiclana ya tienen autorización para la apertura de su actividad comercial.

En la capital de la provincia, sin embargo, se mantienen las restricciones en su frontera ya que le está costando bajar de los 500 en su tasa de incidencia.

Esta situación podría normalizarse en una semana. Aunque poco a poco, los contagios están a la baja y con ello la ya famosa tasa. Este jueves se situaba en 559,6 por lo que la tendencia es que esté por debajo de los 500, el tope para el cierre perimetral, en apenas unos días. Teniendo en cuenta que el comité de expertos de la Junta se reúne los jueves para valorar la situación en los más de 700 municipios de la región, habrá que esperar a este día de la próxima semana para dar este paso en la desescalada en la capital.

Hay que tener en cuenta también la importante reducción en contagios detectados en los últimos 14 días, cantidad que sirve para fijar la tasa de incidencia. Ahora está en 646 casos, que se reducen a 160 en 7 días. Son datos optimistas de cara a garantizar una importante reducción de la tasa.

La ciudad inició febrero, hace poco más de tres semanas, con su tasa más alta: 991, rozando incluso la obligación del cierre de todas las actividad económicas no indispensables. En estas semanas ha reducido la presión del coronavirus en 450 puntos. Cuando se llegó al récord el número de contagiados en 14 días estaba por encima del millar, mientras que los datos a 7 días se elevaban a 433.

Con todo, la tercera ola ha afectado de forma muy dura a la capital. El año se inició con una tasa de 62,9 por cada 100.000 habitantes, lo que nos situaba entre las de menor incidencia en toda España. En un mes se disparó más de 900 puntos. Ahora, por fin está a la baja.

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