Vecinos de Chiclana aún trabaja en las labores de limpieza y desagüe a causa del intenso aguacero del pasado sábado, sobre todo para eliminar las zonas enfangadas del interior de viviendas, garajes o centro comerciales. Familias de distintos puntos del término chiclanero se empleaban a fondo ayer para dejar en condiciones sus inmuebles, pero con la mirada en puesta en el cielo, ya que la lluvia no cesa, si bien con menos fuerza pero de forma persistente desde por la tarde. Además, los desbordamientos de los arroyos Carrajolilla y Ahogarratones han dejado al descubierto numerosos daños al arrasar el agua con carreteras y poner en peligro a familias que viven en esas zonas.

En general, los estropicios originados por el temporal son considerados por el Ayuntamiento como "muy graves", tanto en casas como en equipamiento municipal. En especial cabe resaltar que entre las instalaciones más perjudicadas por el temporal se encuentra la estación depuradora de la playa o la carretera del Molino Viejo, a la altura del Coto la Campa. El Consistorio precisa que hasta que no se conozcan con exactitud todos los daños no se podrá realizar un balance económico.

Por otro lado, el Ayuntamiento realojó durante la jornada del sábado a 29 personas en un hostal de la localidad, después de que sus viviendas quedaran inundadas, unos datos que han sido aportados después de la última reunión de coordinación mantenida, celebrada en la mañana de hoy en el Consistorio. Entre esos afectados se encontraban familias de nacionalidad inglesa (ocuparon 4 de las 12 habitaciones) quienes decían desconocer el riesgo de inundaciones que corrían sus casas cuando las adquirieron años atrás. La mayoría de los realojado en el establecimiento hotelero procedían de El Marquesado, Pinar de Los Franceses, El Sotillo, Carabineros o la zona del Pago del Humo. No obstante desde el Ayuntamiento se apunta que el número de personas que ha debido abandonar sus viviendas por culpa de las lluvias, es mayor, puesto que muchas de ellas optaron por alojarse en casas de familiares.

Ante los numerosos de daños, el alcalde, José María Román, ha solicitado información sobre las nuevas ayudas que las administraciones superiores concederán a los afectados. La oficina que se había abierto en la Gerencia de Urbanismo estaba dispuesta, en principio, para los afectados de las inundaciones de febrero, para que solicitaran las ayudas que había arbitrado el Gobierno central.

El regidor chiclanero añadió que ya ha establecido contacto con las administraciones superiores para realizar un primer informe verbal de los daños más importantes, a la espera de la elaboración de un dossier que incluyan todos ellos.

La amplitud del término chiclanero dificulta aún más la labor de evaluación de todos los desperfectos, sobre todo ante la infinidad de carriles y edificaciones perjudicadas en las zonas del extrarradio.