Los vecinos de la barriada Río San Pedro, en Puerto Real, llevan años soportando las obras del segundo puente sobre la vía que han generado inconvenientes, principalmente, por el tránsito de camiones, polvo y ruido. En los últimos meses se agravaba con los trabajos en los viales que reparten el tráfico en una zona de gran influencia para los vecinos: la entrada y salida de vehículos a la capital o el polígono Río San Pedro.

Sin embrago, esa nueva distribución del tráfico ha dejado un espacio triangular de 30.000 metros cuadrados, paralelo a la calle Proa que el Ayuntamiento quiere convertir en un espacio de ocio familiar. Una forma de compensar a los vecinos al tiempo que dotar a la barriada de una de las infraestructuras históricamente demandadas por todos ellos.

Por ese motivo, el equipo de gobierno ha solicitado al Ministerio de Fomento que le ceda esta parcela y que colabore en su urbanización para que sea el Consistorio puertorrealeño el que se haga cargo, con fondos propios, de la dotación de equipamiento de ocio.

La petición ya está hecha y el proyecto también ha sido redactado por la Oficina Técnica Municipal. Según explica la alcaldesa, Maribel Peinado, "se van a mantener los elementos útiles, porque la carretera que ya no se usa se repara y se conserva, adaptándola para deportes de rueda (patinaje, bicicletas, juegos de adultos teledirigidos…) para footing y entrenamiento (pues llevará marcaciones de distancias, control de tiempos o dibujos de pistas deportivas) y por supuesto con total accesibilidad".

Asimismo se quiere mantener la estructura de los caminos naturales, adecuando su pavimentación al uso que van a tener, y que son los que van a definir los distintos espacios lúdicos y las islas verdes que se repoblarán con árboles, rodales de retamas, palmitos o romero, de bajo consumo de agua. En cuanto a los espacios lúdicos, Maribel Peinado ha anunciado que la intención es dotarlos de equipamientos para distintas edades y actividades, entre las que destacan zona de merendero, una pista de educación vial de 600 metros cuadrados, pista de skate de 1.500 metros cuadrados, pistas deportivas y de patinaje circular, zonas de ejercicio biosaludable, parque de aventuras e incluso suelta de mascotas.

"Igualmente hemos creído conveniente una zona de restauración en forma de quiosco para bar con aseos y terraza", asegura la alcaldesa, que espera que "tenga tanto éxito como está cosechando la intervención municipal en el Paseo de Andalucía". El proyecto se completa con la instalación de riego, alumbrado de caminos y zonas de ocio y bebederos.

Para la alcaldesa de la ciudad "la obra que se está llevando a cabo en el término municipal de Puerto Real constituye una excelente oportunidad para otorgar al Río San Pedro una zona de esparcimiento de la que carecía, destinada al ocio de familias, niños y mayores, y que supondrá el inicio de la transformación de la barriada que tenemos proyectada", finaliza la alcaldesa, Maribel Peinado.