El presidente del Partido Popular de Andalucía exigió ayer que haya "inhabilitaciones ejemplares" para al menos una docena de cargos socialistas por su supuesta implicación en la "trama" de los ERE fraudulentos que, según precisó, "ha supuesto un despilfarro de 700 millones de euros en las arcas públicas andaluzas".

Esta reclamación la realizó el máximo responsable del PP-A ayer en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Cádiz, donde presidió la reunión del comité ejecutivo regional de esta formación política. En su intervención, Arenas anunció que "en los próximos días" el PP pedirá en el Parlamento andaluz esta decena de inhabilitaciones para cargo público, apostillando que "los primeros de esa lista" serán el expresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, y su sustituto en el cargo, José Antonio Griñán.

Arenas volvió a dejar ayer meridianamente claro que el caso de los ERE será el principal ariete que utilizará el PP en Andalucía tanto en la próxima campaña electoral para las generales del 20-N como para los comicios autonómicos de la primavera. Por eso insistió en decir que un caso como este "no se produciría jamás con un Gobierno andaluz del PP" porque, adelantó, "nosotros aplicaremos una Ley de Hacienda Pública" que tendrá como finalidad "que nadie gaste un euro sin que lo firme antes un funcionario o un interventor". Y reiteró que de esta manera "habríamos ahorrado los 700 millones de euros que se han gastado en despilfarro, arbitrariedades y capricho del PSOE".

Pero además del caso de los ERE, Arenas también sustentó sus ataques al Partido Socialista en la crisis económica. Los datos del paro de septiembre conocidos ayer le dieron pie para afirmar que éstas son "las peores cifras de los últimos 15 años", para asegurar que en Andalucía hace falta "con urgencia" la aplicación de un plan industrial y para recordar los logros del Gobierno de Aznar, en cuyos inicios él fue ministro de Trabajo. "Los gobiernos del PP posibilitaron que las pequeñas y medianas empresas crearan en España cinco millones de empleos y hoy tenemos en nuestro país cinco millones de parados. Esa es la diferencia", recalcó.

Esta idea le llevó a afirmar que ante el desempleo "sí hay soluciones". "La situación es muy complicada, nos esperan muchas dificultades pero claro que hay soluciones. El PP ya demostró en su día que se puede salir de una crisis y ahora lo va a demostrar otra vez", subrayó antes de cuestionar "las mentiras y las improvisaciones" de los dirigentes socialistas y antes de preguntar en voz alta: "¿Dónde están los brotes verdes de los que hablaban Zapatero, Rubalcaba, Chaves o Griñán?".

Pero pese a pintar este negro panorama, Javier Arenas aprovechó su intervención de ayer ante la cúpula de su partido en Andalucía y ante decenas de alcaldes andaluces del PP para lanzar un mensaje de esperanza "porque creemos en las posibilidades de esta tierra". Explicó el presidente del PP-A que las próximas elecciones "serán las más transcendentales de nuestra historia desde las generales de 1977". "Entonces tuvimos que luchar por la libertad tras muchos años de dictadura y ahora tendremos que ganarle la batalla a la crisis y al paro", dijo.

Y a la militancia del PP lanzó un mensaje cargado de ilusión y de advertencia a partes iguales. Así, por un lado se mostró convencido de que el cambio que defiende el PP "está en la calle, tanto para las generales del 20-N como, y con más fuerza quizás, para las elecciones andaluzas", apostillando al respecto que los andaluces "están hartos de 30 años del PSOE, de que haya un 30% de paro y de que los socialistas se hayan quedado sin liderazgo después de que se fuera Chaves y no viniera nadie a sustituirlo".

Pero tras precisar que "cada día estamos más acompañados por la sociedad", que "nadie nos va a apartar del camino del centro y del reformismo" y que "el círculo del cambio lo vamos a cerrar", Arenas también advirtió a la militancia de su partido que les esperan "unos meses muy duros" porque, vaticinó, "el PSOE hará lo imposible para no renunciar a 30 años de abusos en Andalucía". "Si después de perder las diputaciones apostaron por su desaparición y si tras perder 22 de las 25 alcaldías más importantes de Andalucía se niegan a convocar la asamblea de la FAMP, no me imaginó qué harán para no perder sus privilegios en Andalucía", reflexionó el líder del PP-A.