Mundo

Once países, entre ellos España, urgen a una respuesta internacional en Siria

  • El comunicado, difundido por la Casa Blanca, lamenta la "paralización" del Consejo de Seguridad. Obama ha buscado sin éxito aliados durante la reunión del G20, mientras Francia esperará al informe de la ONU.

Los Gobiernos de Australia, Canadá, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudí, España, Turquía, Reino Unido y EEUU pidieron una "fuerte respuesta internacional" tras el uso de armas químicas en Siria, según un comunicado divulgado por la Casa Blanca. "Llamamos a una fuerte respuesta internacional a esta grave violación de las normas y la conciencia mundial, que envíe un claro mensaje para que este tipo de atrocidad no vuelva a repetirse", indica la nota, emitida tras la cumbre del G20 en la ciudad rusa de San Petersburgo. El comunicado añade que "los que perpetraron estos crímenes deben asumir la responsabilidad".

Los once países califican el ataque del pasado 21 de agosto en los suburbios de Damasco de "horrible", y afirman que "la evidencia claramente apunta al Gobierno sirio como responsable", pese a que las autoridades de ese país lo niegan y acusan a la oposición armada. Asimismo, la nota añade que los once países subrayan que han respaldado de forma sistemática su apoyo a "una contundente resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas", pero reconocen que ese organismo se "encuentra paralizado como lo ha estado durante los últimos dos años y medio" desde que estalló la guerra civil en Siria.

"El mundo no puede esperar a fracasados procesos sin fin que solo pueden llevar a un mayor sufrimiento para Siria y la inestabilidad regional", señalan los Gobiernos, de acuerdo con el comunicado divulgado por la Casa Blanca. Destacan, además, su respaldo a los "esfuerzos llevados a cabo por EEUU y otros países para asegurar la prohibición del uso de armas químicas". Por ello, instan a la misión de inspectores de la Naciones Unidas que recogió pruebas en el lugar del ataque a presentar "sus resultados lo antes posible", y al Consejo de Seguridad "a actuar en consecuencia". El comunicado condena "en los términos más contundentes" las violaciones de los derechos humanos de todos los bandos en el país árabe, y los once Gobiernos insisten en su compromiso con la búsqueda de "una solución política que tenga como resultado una Siria unida, que incluya a todas las partes, y democrática".

Obama sigue buscando aliados

El presidente estadounidense,  Barack Obama, fracasó en su principal objetivo en la cumbre del G20 que en San Petersburgo: buscar más aliados para un ataque contra el régimen sirio en represalia por su presunto uso de armas  químicas. Divididos entre la vía militar impulsada por Washington y el  tajante rechazo del presidente ruso y anfitrión de la cumbre, Vladimir Putin, los líderes del G20 fueron incapaces de alcanzar un acuerdo. Ni siquiera una última reunión cara a cara entre Putin y Obama sirvió para acercar posiciones. "Nos entendemos mutuamente, nos escuchamos mutuamente, pero no estamos de acuerdo", comentó el ruso tras la bilateral de 20 minutos. El hecho de que la cumbre del G20 no lograra desatascar la situación exasperó a líderes como el italiano Enrico Letta, que  calificó de "dolorosa" la falta de acuerdo, y a organismos humanitarios como Oxfam, que denunciaron "una ocasión perdida". Pero  la falta de movimiento es en la práctica una derrota de Obama. 

Durante los dos días de cumbre y sobre todo en la larga cena del jueves, la Unión Europea y la mayoría de países emergentes como Brasil, India o Argentina insistieron en la vía diplomática y se distanciaron de un ataque. El propio Obama resumió la situación dentro del G20: los jefes de Estado y de gobierno del grupo están de acuerdo en que se usaron armas químicas en el ataque que dejó más de mil muertos el 21 de agosto en las afueras de Damasco y la mayoría cree que el presidente Bashar al Assad fue el responsable. 

Sin embargo, el grupo sigue dividido en cómo responder esa agresión y en el papel que debe desempeñar la ONU. En términos concretos, Obama no consiguió ningún nuevo aliado internacional. "Respetamos los llamamientos a la acción, pero necesitamos  avanzar en un proceso en la ONU", dijo el presidente del Consejo  Europeo, Hermann van Rompuy, junto al presidente de la Comisión, Jose Manuel Durao Barroso. La mayoría de europeos comparte esa visión, en un consenso que contrasta con la división que provocó en Europa la guerra de Iraq en 2003.

El ataque parece en cualquier caso una posibilidad, cuando se presentaba inminente. A la espera de que el Congreso estadounidense vote a partir del lunes si autoriza una misión, Obama dispone de dos opciones principales. La primera es seguir enfriando el conflicto al ritmo de la comunidad internacional y mantenerlo por la vía diplomática, lo que implica esperar el informe de inspectores de la ONU que pruebe el uso de armas químicas. La segunda opción es atacar con el aval del Congreso y poco apoyo internacional. Obama podría aclarar más el panorama el próximo martes, cuando dirigirá un mensaje televisado a la nación sobre la crisis en Siria. 

Cameron no excluye acciones en Siria sin el mandato de la ONU

Por su parte, el primer ministro británico, David Cameron, dijo que no excluye acciones en Siria sin mandato de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU. "Todos creemos que ha llegado el momento de actuar para evitar una catástrofe humanitaria. Será mejor con resolución, pero no se pueden excluir acciones si no se logra", dijo en San Petersbrurgo. Cameron dijo haber sentido tristeza cuando escuchó a "algunos participantes en la cumbre decir que es algo que sólo se puede decidir con el mandato del Consejo de Seguridad a sabiendas que ellos mismos forman parte del mismo y pueden vetar cualquier decisión".

El primer ministro de Reino Unido afirmó que cada Estado debe responder por sí mismo y no seguir una decisión común. "Si vivimos en un mundo en el que el presidente estadounidense traza una línea roja, dice que habrá reacción y luego no la hay, me entra miedo por este mundo. No sólo por que el dictador del que hablamos, Bachar al Asad, podría seguir usando estas armas químicas, sino porque también otros dictadores seguirán su ejemplo", advirtió. Cameron defendió la necesidad de una intervención armada en Siria, anunciada hace días por Obama, y aseguró que el líder norteamericano "tiene muy claro lo que va a hacer". "Tenemos algo que aprender de los genocidios que se han dado en la historia", dijo el líder británico, que manifestó su absoluta confianza en que las pruebas sobre el uso de armas químicas por el régimen sirio que presentará Obama al Congreso de EEUU "serán excepcionalmente convincentes".

Francia decidirá tras el informe de la ONU

Mientras, el presidente de Francia, François Hollande, afirmó que decidirá sobre la participación de su país en un ataque contra Siria sólo tras el informe de los expertos de la ONU. "Ahora, esperamos la decisión del Congreso y el Senado de EEUU. Después, el informe de la ONU. Como resultado de todo esto, tomaré una decisión. Me dirigiré al pueblo y anunciaré mi decisión", afirmó Hollande en San Petersburgo.

Hollande añadió que, si se mantiene el actual callejón sin salida en el Consejo de Seguridad de la ONU, París asumirá sus obligaciones. El mandatario galo subrayó que "muchos países, incluida Francia, tienen suficiente cantidad de pruebas. No se puede negar. Nosotros también tenemos pruebas, según las cuales, precisamente el régimen (de Bachar al Asad) que se encuentra en el poder utilizó esas armas químicas". "Seguramente no diré nada nuevo al afirmar que es necesario reaccionar con gran responsabilidad ante los horrores que ha sufrido la población civil", apuntó. Según Hollande "el conflicto en Siria no tiene solución militar. El arreglo debe ser político. Pero una solución militar puede acelerar la búsqueda de una solución política y esto hay que entenderlo". El líder francés destacó que si se adopta la decisión de castigar al régimen sirio por el uso de armas químicas el castigo debe ser "una respuesta proporcional, puntual y limitada, cuyo objetivo no será el derrocamiento del régimen". "Francia apuntará sólo a objetivos militares para proteger a la población civil", señaló.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios