Volvo Cars limitará la velocidad máxima de todos sus vehículos a 180 kilómetros por hora a partir de 2020 para resaltar los peligros del exceso de velocidad, según ha anunciado la compañía.

Esta medida se enmarca en la "Visión 2020" de la compañía, que tiene como objetivo que nadie fallezca o resulte herido de gravedad en un vehículo de la firma para 2020.

Además de la limitación de la velocidad, la compañía también está investigando cómo una combinación de control de velocidad inteligente y tecnología de 'geofencing' podría limitar automáticamente las velocidades en colegios y hospitales en el futuro.

"Queremos iniciar una conversación sobre si los fabricantes de vehículos tienen el derecho e incluso la obligación de instalar tecnología en los coches que cambie el comportamiento de sus conductores, para abordar el exceso de velocidad, la intoxicación por consumo de alcohol y drogas, o la distracción", señaló el presidente y director ejecutivo de Volvo, Hakan Samuelsson.

El problema con el exceso de velocidad es que, por encima de ciertas velocidades, la tecnología de seguridad en el vehículo y el diseño de infraestructura inteligente no son suficientes para evitar lesiones graves y muertes en caso de accidente. Por esa razón los límites de velocidad están en vigor en la mayoría de los países occidentales, aunque el exceso de velocidad sigue siendo "omnipresente" y una de las razones "más comunes" de muertes.

Volvo presentará ideas para abordar las áreas problemáticas de intoxicación y distracción en un evento de seguridad en Göteborg (Suecia), que tendrá lugar el 20 de marzo.

Volvo Cars aumenta en un 11,3% sus ventas globales en los dos primeros meses de 2019

Más ventas

Esta medida llega en un buen momento para Volvo. El fabricante sueco registró un aumento en sus ventas globales del 11,3% durante los dos primeros meses del año, alcanzando las 93.863 unidades vendidas, en comparación con las 84.369 unidades que registró en el mismo período del año anterior, según datos publicados por la compañía.

La firma automovilística explicó que el crecimiento de las ventas estuvo liderado por el "sólido" desempeño de la gama de todocaminos de Volvo, especialmente por el XC60, seguida del XC40 y el XC90. Por su parte, el nuevo V60 y el sedán S60, fabricado en Estados Unidos, también contribuyeron al incremento de las ventas.

En el mes de febrero, la compañía vendió un total de 43.184 unidades, lo que se traduce en un aumento del 5,5% en comparación con las 40.930 que vendió en el mismo mes del año pasado.

Por regiones, las ventas europeas de la compañía crecieron un 12,9% en los dos primeros meses de 2019, con 49.195 unidades vendidas, en comparación con el mismo período del año pasado, cuando registró unas ventas de 43.571 unidades. El crecimiento de dos dígitos, según argumenta la compañía, se debió a la "fuerte" demanda de los todocaminos XC60 y XC40 y el nuevo V60.

En China, la firma vendió un un 2,2% más en los dos primeros meses del año, hasta las 18.473 unidades, en comparación con el mismo período del año pasado, cuando registró un volumen de ventas de 18.489 unidades. En el mes de febrero, sin embargo, las ventas en esta región cayeron un 0.2%.

En Estados Unidos, las ventas alcanzaron las 12.489 unidades en los meses de enero y febrero, un 5,4% más que en el mismo periodo del año anterior, cuando contabilizó 11.850 unidades vendidas.

Por modelos, el XC60 fue el más vendido en febrero, con ventas que alcanzaron las 12.630 unidades (en febrero de 2018 se vendieron 10.308 unidades), seguido del XC40, con ventas totales de 8.176 unidades (en febrero de 2018 se vendieron 1.580 unidades), y del XC90, con 5.752 unidades (en febrero de 2018 se vendieron 6.607 unidades). Los modelos V40 y V40 Cross Country registraron unas ventas de 4.196 unidades (en febrero de 2018 se vendieron 6.109 unidades) y el nuevo V60 Estate vendió 3.849 unidades en febrero.