La planta de Volvo en Gante (Bélgica) ya ha arrancado la producción del C40 Recharge, el nuevo modelo eléctrico de la marca sueca. Será uno de los que le ayude a conseguir ser una firma al ciento por ciento eléctrica en 2030. En 2025 su intención es que la mitad de las ventas sean ya de coches sólo eléctricos.

En Gante también se ensambla el XC40 Recharge, el primer Volvo exclusivamente eléctrico y con muchos elementos en común con el C40: ambos utilizan la plataforma CMA. Para hacer posible la fabricación de ambos se ha aumentado la capacidad de producción de la factoría belga hasta las 135.000 unidades al año.

Las diferencias entre el XC40 y C40 se centran del pilar posterior hacia atrás y, fundamentalmente, en la inclinación que toman techo y portón posterior..

Asimismo, la compañía sueca ha instalado junto a esa planta una de ensamblaje de baterías, para montar los módulos en los paquetes utilizados en sus coches.

El Volvo C40 Recharge podrá encargarse por parte de sus clientes vía online, desde su hogar o el concesionario. Con la compra, estos dispondrán de un pack compuesto por elementos como servicio, garantía o asistencia en carretera, junto con seguro u opciones para la recarga de su batería en casa.

El precio del Volvo C40 Recharge arranca en los 53.000 euros y puede adquirirse online.

Esta será de 78 kWh y podrá permitir alcanzar una autonomía de 441 km.

El C40 Recharge, como inicialmente ocurría con el XC40 Recharge -recientemente estrenaba una versión con un único motor- tiene un motor en cada uno de los dos ejes y una potencia combinada de ambos de 408 CV.