Primero fue el Audi Q4 e-tron y, ahora, el Sportback e-tron. Así la firma alemana muestra los dos nuevos modelos eléctricos, por el momento con el apellido Concept pero ya muy cercanos a como serían al pasar a la producción, que se situarán por debajo de los ya conocidos e-tron, precio y tamaño (4,90 m de largo y desde 73.000 euros), que no por potencia y autonomía eléctrica. Estos Audi Q4 e-tron se comenzarán a comercializar en 2021.

El nuevo Audi Q4 Sportback e-tron es un SUV de tamaño medio-grande, con 4,60 m -sólo un centímetro más que el Q4 e-tron- con cinco puertas y silueta de coupé en tanto que la zona final de su techo se inclina hacia abajo. Tiene un Cx de 0,26, es decir, 0,01 menos que el e-tron.

Con una distancia entre ejes de 2,77 m promete se un referente en amplitud interior para sus cuatro ocupantes, más cuando no cuenta con túnel de transmisión. En su habitáculo abundan los materiales reciclados en tanto que Audi ha dado prioridad a la sostenibilidad durante el proceso de producción.

La plataforma utilizada, como en el e-tron respecto al que es técnicamente idéntico, es la MEB como la de la familia ID de Volkswagen.

Q4 e-tron, a la izquierda; y Q4 e-tron Sportback, a la derecha, conformarán el siguiente escalón en la gama eléctrica de Audi.

En los Audi Q4 e-tron monta un motor eléctrico por eje, con una potencia total de ambos de 360 CV -el e-tron menos potente tiene 313 CV, el que más, el e-tron S, 503-. Acelera de 0 a 100 km/h en 6,3 segundos y la velocidad máxima es de 180 km/h

Estos motores eléctricos, que en la práctica permiten a estos SUV contar con tracción total pero pueden trabajar independientemente, sin que lo haga el otro; se alimentan de una batería de 82 kWh con la que es posible recorrer más de 450 km y puede ser recargada con una potencia de hasta 125 kW. Esto permite, en unos 30 minutos, alcanzar el 80 por ciento de su capacidad total.

Esa batería pesa 510 kg y con su situación bajo el piso, entre los dos ejes, permite que el reparto de peso quede equilibrado entre ellos. Esto, debe contribuir a conseguir una ágil dinámica de conducción.