La Guardia Civil ha detenido a una persona en Barbate como presunto autor de un delito de tráfico de drogas, cuando trasportaba 56 gramos de cocaína en roca y 16 gramos de heroína, siendo denunciado además por vulneración de la normativa que regula los desplazamientos durante la vigencia del estado de alarma decretado por el Covid-19. Desde la explotación de la operación Carrero, la Guardia Civil de Barbate trabaja de forma incansable para que otros clanes no tomen el relevo del desarticulado clan del Norberto.

La actuación se desarrolló al filo de la pasada medianoche, en la zona de Blas Infante, cuando los guardias civiles que controlaban los accesos a la localidad jadeña para la verificación del cumplimiento de la normativa en el marco del protocolo del Estado de Alarma decretado por la incidencia del coronavirus, identificaron al conductor de una furgoneta marca Citröen modelo C-15.

Una vez procedieron a su identificación, los guardias civiles preguntaron al conductor por el motivo del desplazamiento que realizaba, siendo poco coherente en sus manifestaciones. Los guardias civiles procedieron a realizar un registro de las ropas y pertenencias del identificado, hallando dos envoltorios de plástico, en cuyo interior se encontraron 56 gramos de cocaína en roca y 16 gramos de heroína, por lo que de forma inmediata se procedió a su detención, como presunto autor de un delito contra la Salud Pública por Tráfico de Drogas, siendo denunciado además al Real Decreto 463/2020, que regula los desplazamientos durante la vigencia del Estado de Alarma.

Hay que reseñar que la cocaína que se trasportaba se podía adulterar para multiplicar las dosis que llegarían a los consumidores en forma de 'rebujo', mezcla de heroína y cocaína, que posee un alto poder adictivo, y que al poder consumirse, inhalada o fumada, la hace más atractiva para los más jóvenes que se inician en el consumo de estupefacientes, ya que se evita el rechazo que produce la introducción intravenosa. Además, el precio de las dosis en el mercado es tan bajo, que puede tentar a jóvenes de corta edad a iniciarse en el consumo, por lo que el trabajo que realiza la Guardia Civil en este aspecto es fundamental para garantizar espacios saludables para los más jóvenes.