Sin Olona, la campaña electoral de Juanma Moreno sería un paseo dominical, tan centrado que no disgustaría ni a la izquierda.

Hay una solución para los temporales: retranqueen paseos y concesiones, que se han echando encima del mar.

Si Alberto Núñez Feijóo logra empaquetar a Díaz Ayuso en su personaje, sin la angustia de Pablo Casado, la sorteará.

La Semana Santa en Andalucía no necesita protección institucional ni política, en todo caso, hace falta mesura.

Bendodo o Loles López estarán en el comité de dirección del nuevo PP, Feijóo necesita que Andalucía funcione mejor que Castilla y León.

Pedro Sánchez está volcado en el gran momento de la Unión Europea, pero su retaguardia lo arruina.

El PSOE puede perder un Gobierno con este estado general de cabreo, pero el PP corre el riesgo de perder el sitio.

El efecto Feijóo llegará en abril, pero no tiene por qué * ser duradero, la única baza del PP-A es Juanma Moreno.

Después del extrañamiento medieval de Abu Dabi, regresará a España pero no vivirá en Zarzuela, tiene 84 años. No sean tan inquisidores.

No sólo es Rusia, casi todos los países con combustibles fósiles son un riesgo: Argelia, Venezuela y los del Pérsico.