Una sombrilla de playa de lo más colorida, un juego de maletas con corazones, lunares o estrellas y a lo largo de la pasarela, una alfombra de esterilla a rayas era el escenario que la madrileña preparaba junto a su equipo en Ifema. Ágatha Ruiz de la Prada (Madrid, 1960) ultimaba el pasado domingo los detalles para la puesta en escena de su nueva colección primavera/verano 2011 en Cibeles Madrid Fashion Week. La diseñadora, nerviosa por mostrar al mundo sus últimas creaciones, tomó aire y se sentó en las gradas donde a las seis y media de esa misma tarde los invitados disfrutarían de su magnífico trabajo. Irrumpió por primera vez en el mundo de la moda en 1981 presentando su primera colección de moda para mujer en Madrid. Hija de un famoso arquitecto y de una aristócrata catalana, estudió en la Escuela de Artes y Técnicas de la Moda de Barcelona. Tuvo tan buena acogida que al poco tiempo abrió su primer estudio en la capital y comenzó a participar en pasarelas nacionales viéndose sumida en una auténtica revolución artística gracias a sus diseños coloridos y multiformes. Hoy, De la Prada, trabaja con más de cuarenta licenciados y ha expedido su gama de productos hasta incluir moda para hombres, mujeres y niños, juguetes, productos de aseo, colchones, maquillaje, perfumes, joyería y un largo etcétera. Esta amplia gama de productos se distribuye a través de las tiendas exclusivas de la diseñadora en Madrid, Barcelona, París, Milán, Nueva York y Oporto además de en tiendas de distribuidores independientes en más de 140 países. Está casada con el periodista y director Pedro J. Ramírez. La pareja tiene dos hijos, Tristán Jerónimo y Cósima Oliva.

-Exposición al más puro estilo Ágatha Ruiz de la Prada. ¿En qué se basa esta nueva colección?

-Para la próxima temporada sigo los preceptos que siempre he defendido. Es más Ágatha que nunca. Se aprecia rápidamente en el color, el volumen y la comodidad de las prendas. Fíjate en los zapatos, son una verdadera revolución. ¡Me encantan los zapatos de esta colección! ¡Ah, y las gafas! Los vestidos están enfocados más a la comodidad.

-Es una diseñadora con gran reconocimiento nacional e internacional, ¿su carácter firme de empresaria le ha ayudado a llegar hasta donde hoy está?

-Sin carácter no se llega a nada. Siempre con sentido común, pero con austeridad. Tienes que estar siempre pendiente de todo, de ultimar cada detalle, de garantizarle a los clientes la belleza del producto. Llevo muchos años en la industria de la moda y esto te va diciendo cómo trabajar.

-¿Qué espera de esta edición en Cibeles?

-Estoy algo nerviosa. Se supone que debería estar acostumbrada a esto porque yo presento colecciones y organizo desfiles cada poco tiempo, pero Cibeles, es Cibeles. Hoy es un día muy importante y emocionante, por eso espero que salga todo muy bien y que la gente termine ilusionada.

-Treinta años diseñando Ágatha, ¿cómo se proyecta su marca en el futuro?

-La expansión es estupenda y va en aumento. Tenemos mucho trabajo aún que hacer. Mañana a las siete de la mañana mi equipo completo, y yo a las ocho, volamos a Viena porque presentamos la nueva colección en Austria. Hemos estado también ahora en Aguascalientes y Monterrey, en México. No paramos.