Isabel Preysler ha dado su visto bueno a la relación de su hija pequeña, Ana, con el tenista Fernando Verdasco. Visiblemente más delgada aunque igual de deslumbrante que siempre, la 'reina de corazones' acudió como embajadora especial en la noche del miércoles a la primera pasarela de moda filipina que se celebró bajo el título de Piña. Isabel asistió a los desfiles que se desarrollaron en el Hotel Intercontinental de Madrid invitada por la diseñadora Patis Tesoro y no dudó en responder a las preguntas de los periodistas sobre el incipiente noviazgo de su hija, Ana Boyer, con el atractivo Verdasco.

Como es habitual en ella, la filipina más mediática de España se convirtió nada más llegar en el centro de atención de los medios allí presentes. Con un vestido de encaje color rojo, tacones de vértigo y la melena algo más corta de lo habitual, demostró una vez más su conocida elegancia. Aunque esta vez, además de su vestimenta, llamó la atención su notable delgadez; la enfermedad y lenta recuperación de su marido, Miguel Boyer, podría ser una de las causas de su cambio físico.

Una de las preguntas que flotaban en el aire era su opinión acerca del nuevo romance de su hija. A lo que contestó sonriente a los periodistas: "(Fernando Verdasco) es encantador". Además de esto, añadió que no es quién para decidir qué pareja es la más adecuada para su hija: "A quién le tiene que gustar es a ella".

La joven pareja ha sido recientemente portada de la revista ¡Hola!, en cuya fotografía principal aparece sin mostrar actitud amorosa o cariñosa alguna pero demostrando una evidente complicidad entre ambos, lo que da a entender que su relación va más allá de la amistad.

Entre los invitados al evento de moda que contó con la presencia de Preysler destacó también la asistencia de Carolina Thieu, viuda de Tomás Chávarri, y el embajador de filipinas en España, Carlos Salinas. La modista Patis presentó su colección de alta costura, tan elegante como original, pues los diseños están confeccionados con un tejido tan ecológico y revolucionario: la fibra de piña. Esta diseñadora filipina ha conseguido que sus creaciones lleguen a la alfombra roja de los Oscar en forma de exquisitos trajes de fiesta de tela hecha a base de piña y bellísimos bordados artesanales. Además, ha logrado dinamizar la economía de pueblos enteros de su país en los que se elaboran estos asombrosos tejidos.

Isabel volverá a acaparar flashes probablemente mañana en la boda de María Colonques, hija del dueño de Porcelanosa, que se celebrará en Valencia. A los periodistas adelantó que para tal ocasión tiene previsto lucir un modelo de Óscar de la Renta.