Modelo y cantante de vocación y primera dama francesa por elección, Carla Bruni está a punto de traer al mundo a su primer hijo con el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy. Carla, de 43 años, que salió de cuentas el 1 de octubre, fue ingresada el jueves en la clínica La Muette de París para dar a luz.

Ella ya tiene otro hijo de 10 años de edad y él, otros tres de dos matrimonios anteriores. Pero este será su primer hijo o hija en común, pues el matrimonio no ha querido conocer el sexo antes de que el bebé nazca.

Al parecer, el parto será programado e inducido para evitar más molestias de la futura mamá, que ya está muy pesada y cansada al haberse cumplido una semana de que salió de cuentas.

Desde hace un mes, de hecho, la familia tenía reservadas en el hospital cuatro habitaciones tipo suite para encontrarse lo más cómodos posible este feliz día. Casa una cuesta 250 euros por noche. Con todo, un médico del centro asegura que "no es nada particularmente lujoso".

La pareja, que no ha llegado ni siquiera a emitir un comunicado oficial informando de que van a ser padres (el embarazo se supo cuando resultó evidente a simple vista de la figura de Bruni), no tienen previsto hacerse las típicas fotografías a las puertas de la clínica presentando a su recién nacido a la prensa y a la opinión pública. "Se trata de algo privado", ha añadido al respecto un asesor del presidente: "El embarazo no se anunció oficialmente y ahora cuando llegue el bebé sucederá lo mismo", confirma.

El hijo de Bruni y Sarkozy será el primer recién nacido que viva en el Elíseo. En España aún no se ha dado el caso de que un presidente se convierta en padre durante su mandato. En el Reino Unido, sí; Samantha Cameron o Cherie Blair dieron a luz durante su estancia en Downing Street. Jackie Kennedy también dio a luz siendo primera dama, pero su hijo nació muerto.

Se ha especulado mucho sobre el día previsto para el nacimiento, pero el padre de Sarkozy, Pàl Sarkozy, ha sido el único que avanzó en su momento una fecha: el 3 de octubre. Sin embargo, el día llegó, pasó, y no se ha sabido nada del bebé. La propia Carla, dijo, además, que "a partir del 1 de octubre podría ser en cualquier momento". Su primer hijo, Aurélien, "también llegó antes de tiempo". Pero parece que el segundo se lo está tomando con más calma.

Es cierto que la llegada del petit Nicolas -como lo han bautizado los medios franceses- se está haciendo de rogar. Mientras los paparazzi llevan días al acecho, los funcionarios del gobierno se encogen de hombros con resignación ante las insistentes preguntas sobre el retoño del presidente. "No sabemos nada", subrayaban el jueves desde el Ministerio del Exterior. Aunque, cuando llegue, seguro que la prensa y el público nos enteramos días más tarde. Como ocurrió con el embarazo.