España tendrá que jugar contra  Rusia, en semifinales de la Eurocopa 2008 el jueves en Viena, con su  vestimenta alternativa amarilla, algo que no le debe gustar a su supersticioso entrenador, Luis Aragonés, que huye de ese color.

A la selección española le ha tocado ser visitante en este partido y tendrá que cambiar su camiseta roja, coincidente con la rusa, por una amarilla, aunque lucirá un pantalón azul, ya que su rival lo llevará blanco.

En el primer partido que disputaron ambas selecciones en la Eurocopa, que  terminó con victoria española por 4-1, España jugó como local y fue Rusia la  que se tuvo que cambiar de equipación y vistió de blanco.

Luis Aragonés odia el amarillo y en una concentración de la selección española antes del Mundial 2006, le pidió al delantero del Real Madrid, Raúl  González, que se quitara una camiseta de ese color que llevaba en ese momento.

Aunque España, con Aragonés en el banquillo, le ganó a Francia un amistoso, el pasado mes de febrero en Málaga (1-0), con camiseta amarilla y pantalón  blanco.

Marcos Senna estaba encantado con el hecho de jugar de amarillo, no en vano su club, el Villarreal, tiene la camiseta y el pantalón de eso color. "A mí me va bien",  dijo sonriendo.

El centrocampista Xavi Hernández recordó que ese color les  había ido bien cuando se enfrentaron recientemente a Francia. "Espero que nos traiga suerte. Ya ganamos a Francia vistiendo de amarillo".