El Partido Socialista encara otra semana turbulenta por sus batallas internas. El triunfo de Miquel Iceta, uno de los principales defensores de Pedro Sánchez y crítico con todo aquel de su formación que se plantee la abstención en la investidura de Mariano Rajoy, para revalidar su mando al frente del PSC el pasado sábado puede provocar otro quebradero de cabeza a la gestora socialista presidida por Javier Fernández, a pesar de que su rival en las primarias, Núria Parlon, también era contraria a facilitar un Gobierno del Partido Popular.

La difícil tesitura que afrontan los socialistas antes del Comité Federal del próximo sábado la conoce bien Fernández y por ello tiene previsto dialogar con Iceta en los próximos días ante su amenaza de que los diputados catalanes votarán en contra de Rajoy aunque el Comité Federal cambien el no por la abstención.

Fernández anunció la pasada semana que, una vez que el PSC celebrase sus primarias, se pondría en contacto con el vencedor para analizar el actual escenario y transmitirle la obligación de que sus diputados acaten la disciplina de voto. La conversación prevista entre ambos se enmarca también en la ronda de contactos bilaterales que el presidente asturiano está manteniendo con los secretarios generales territoriales sobre qué postura adoptar en la investidura de Rajoy.

Ferraz ha insistido en que la decisión que adopte el Comité Federal, donde también está representado el PSC, sobre la abstención o no a Rajoy tiene que ser cumplida por todos los diputados. La gestora ha sostenido que la amenaza de romper la unidad de voto se justificaba en el proceso interno del PSC y la disputa entre Iceta y Parlon.

La dirección interina del PSOE felicitó la noche del sábado a Iceta y subrayó que "un PSC fuerte debe convertirse en un punto de partida para resolver el futuro encaje de Cataluña en España desde el diálogo y el respeto al marco constitucional". El PSC proclamará oficialmente a Iceta como primer secretario en el congreso previsto los días 5 y 6 de noviembre.

Cuando se elija a la nueva Ejecutiva, deberá nombrar un representante para que pase a formar parte de la gestora del PSOE, como se acordó el pasado día 1 al constituirse la nueva Ejecutiva socialista. Diversos dirigentes del PSOE felicitaron a Iceta en las últimas horas por su triunfo en las primarias, entre ellos Pedro Sánchez.

Para echar más leña al fuego a las discrepancias evidentes entre la gestora y el socialismo catalán -que además se ve fortalecido por el apoyo de la militancia-, el presidente del PSC y alcalde de Lérida, Àngel Ros, recordó ayer a la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que ella "no es la secretaria general del PSOE", formación con la que admite "tensiones", sobre todo tras unas primarias entre los socialistas catalanes que han "reforzado" su no a Rajoy.

En declaraciones a RAC1 y en referencia a las relaciones con el PSOE, Ros reconoció que "hay una situación de tensión que debemos ser capaces de superar". "Pero el papel que está representando Susana Díaz es muy diferente al de los socialistas catalanes, que estamos muy unidos en torno a una posición que las primarias han reforzado", señaló Ros en alusión al rechazo del PSC a facilitar un Gobierno del PP.

El dirigente catalán fue más lejos al afirmar: "Que yo sepa, Susana Díaz no es la secretaria general del PSOE. Deberá defender su posición en los órganos del partido (...) Nosotros creemos que hay que dar la voz a la militancia y actuaremos en consecuencia. El PSC es el último espacio catalanista de este país y para nosotros es imposible investir un presidente que no ha aportado soluciones a la relación entre Cataluña y el resto de España", apostilló.

Por otra parte, el líder del Partido Popular en el Parlamento de Cataluña, Xavier García Albiol, pidió ayer al PSC que "no se convierta en una rémora para la gobernabilidad de España y para el propio PSOE".