El triunfo del socialismo en estas elecciones generales también se ha trasladado a la capital granadina, donde el Partido Popular ha obtenido aplastantes mayorías desde hace varias décadas. A solo un mes de los comicios municipales, y con un 26,64% de los votos, el PSOE se ha impuesto en la ciudad de la Alhambra, donde actualmente gobierna Francisco Cuenca en minoría, gracias a la moción de censura contra José Torres Hurtado en 2016. No obstante, esa victoria, 3 puntos por encima del PP, sería insuficiente para la izquierda, dado que el bloque de derechas ha cosechado una mayoría de votos del 56%.

El castigo del Partido Popular en la capital (23,54% del voto) no ha impedido que se mantenga como segunda fuerza, aún a larga distancia de Ciudadanos (18,4%), que aspira a gobernar en la capital a partir del próximo mes a través de un pacto con PP pero con su líder, Luis Salvador, como alcalde (al suponerse más votado que el popular Sebastián Pérez).

Esa pugna de candidatos entre Ciudadanos y PP la ganaría este último partido si se reprodujeran los resultados de estas elecciones.

El candidato del PP a las próximas elecciones en la capital, Sebastián Pérez, intervino ayer tras la derrota de su partido, pero declaró que "si fuese socialista en la capital no estaría contento. El centro derecha tiene 70.000 votos y la izquierda 40.000 y yo estoy aquí para ganar y dar a Granada lo que necesita". El también presidente del Partido Popular en la provincia agregó: "Unas municipales son unas municipales y las generales, las generales".

La clave para ese posible gobierno en la capital sería Vox, que podría entrar al Consistorio si reedita unos resultados parecidos a estos. En la capital Vox ha cosechado el 14,62% del voto. Aunque éstas son cábalas muy arriesgadas, pues se trata de otro tipo de elecciones (como decía el líder del PP) y además, en las municipales habrá más partidos que presentan candidaturas, sí servirá de referencia a el resultado del 28-A por la proximidad electoral y las inercias de voto que se desprenden.

Además, es necesario convertir los votos en actas de concejal, un proceso en el que se producen muchas sorpresas por las paradojas de la ley electoral, que beneficia mucho a las mayorías.

En otros municipios principales de la provincia, el PSOE también ha obtenido importantes victorias, como Armilla, donde Ciudadanos se había aproximado mucho en anteriores citas electorales. Los socialistas ganan también en Motril, Baza, Guadix y Loja y en Molvízar, un feudo que era indiscutiblemente popular desde hace 28 años, así como Almuñécar y Pinos Genil, plazas que se resistían "desde hace mucho tiempo", como bien se comentaba en la propia sede del PSOE. En casi todos los municipios el PP sufre mucho las consecuencias de la entrada de Vox.