-Está pateándose todas las agrupaciones socialistas. ¿Ve desmoralizada a la militancia?

-En absoluto. Veo un gran interés por los asuntos que planteamos y se genera mucho debate una vez que explicamos las fórmulas que entendemos útiles para recuperar la confianza en el partido.

-¿Y de qué van esos debates? ¿Cuál es el tema principal?

-La democracia interna, sin duda. La militancia escucha con interés propuestas que planteamos y que los otros dos candidatos no tienen.

-Una de ellas es la bicefalia. Usted se presenta como candidato a la Secretaría General, pero no se presentará como candidato en las primarias.

-Es que es una buena fórmula de democracia interna. Al no ser el secretario general juez y parte se garantiza una limpieza absoluta en el proceso de las primarias. Separar lo institucional de lo orgánico creo que es una buena fórmula.

-Con Borrell y Almunia no les fue muy bien.

-Aquello ocurrió hace 16 años. Era otro momento. Para empezar teníamos el doble de militantes y no habíamos tocado suelo ante el electorado.

-Hay quien teme una baja participación de los militantes el próximo domingo.

-No hay motivos para una baja participación. Se están dando muchas facilidades para que todo el mundo opine. Hay incertidumbre, como en cualquier proceso electoral, pero no, no creo que la participación vaya a ser baja.

-Es el que menos avales ha logrado. ¿Qué expectativas tiene?

-No sé, pero sí le puedo decir que los más de 10.000 avales conseguidos son cualitativamente muy valiosos porque se han logrado sin tutelas y sin padrinazgos.

-¿Qué dice usted que sus dos rivales no digan?

-Nuestra crítica y autocrítica quiere mostrar un nuevo proyecto de izquierda, una realidad plurinacional, un combate efectivo contra una reforma laboral que está desangrando la economía de miles de familias, un intenso diálogo sobre la reforma constitucional que necesitamos en profundidad.

-Sus dos oponentes son mucho más jóvenes y juegan con la carta del relevo generacional.

-Es que no creo que el relevo generacional esté necesariamente en la edad. Muchos miembros de las Juventudes Socialistas están apoyando nuestras propuestas. No creo que la edad de los candidatos tenga que condicionar el resultado. Alguno de mis dos oponentes estaba en el grupo parlamentario cuando se modificó el artículo 135 de la Constitución. Yo no estaba allí. Los que me apoyan reconocen mi trayectoria política y académica. Eso también cuenta.

-¿Qué papel cree que ha jugado Susana Díaz en este proceso?

-El futuro congreso cambió cuando ella decidió no presentarse. Me pareció una decisión inteligente no compatibilizar los dos cargos y es cierto que su ausencia hace que el proceso sea más abierto.

-Pero Andalucía sí parece haber tenido influencia en el proceso. Pedro Sánchez ha logrado aquí9 muchos avales.

-Yo me remito a la declaración de Susana Díaz sobre su imparcialidad en el procesdo. No tengo por qué no creerlo, aunque se hayan podido percibir guiños a quien haya querido atenderlos. No niego que, en mi caso, he notado que esa imparcialidasd quizá no se haya producido tal y como uno desearía, pero bueno, son cosas que se sabe que pasan.