El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dado una orden a su partido, el PP, y a los miembros del Ejecutivo: tener una mayor presencia en actos públicos y medios de comunicación y aspirar a ocupar "todos los espacios" para dar su mensaje y defender su gestión. A seis meses de la cita con las urnas en los comicios autonómicos y municipales, Rajoy ha hecho este llamamiento en el Comité Ejecutivo Nacional del PP, la última reunión del partido este año, en la que los populares han perfilado la agenda para el comienzo de 2015. Madrid acogerá así, del 23 al 25 de enero, la convención nacional del partido, que se centrará en las propuestas programáticas, mientras que en febrero tendrá lugar la proclamación de los candidatos a las autonómicas y municipales.

Consciente de que el PP ha pasado por una etapa "complicada" y de que los casos de corrupción les han hecho "mucho daño", como ha admitido en este encuentro, Rajoy ha llamado a los populares a ponerse las pilas ante el año crucial que les espera, no solo por los comicios de mayo o las generales que se prevén meses después, sino también por las posibles elecciones en Cataluña. Hay "muchas cosas que explicar" y una "buena gestión" que defender, les ha dicho Rajoy a los dirigentes del partido, a los que ha subrayado la necesidad de "hablar más" y "ocupar todos los espacios" posibles, según fuentes presentes en la reunión.

Para la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, es "normal" esta llamada del presidente en un momento "especial", marcado por el calendario electoral, y ha señalado en cualquier caso que no conoce un presidente de Gobierno "más implicado con su partido que Rajoy". En rueda de prensa, Cospedal ha recordado que tanto Rajoy como el partido han pedido perdón por los casos de corrupción que han afectado al PP y han apartado a los implicados, algo que también ha recordado el presidente ante el Comité Ejecutivo Nacional. Ante los populares, Rajoy ha defendido las medidas "ambiciosas" en materia de lucha contra la corrupción que ha puesto o va a poner en marcha el Ejecutivo y ha insistido en su deseo de un gran pacto en esta materia, aunque también ha reiterado que si el PSOE no lo apoya, el PP aplicará dichas medidas para demostrar su "lucha sin cuartel" contra esta lacra.

En esta reunión, en cualquier caso, el discurso de Rajoy se ha centrado en el balance económico, y el presidente ha subrayado su satisfacción ante los últimos datos de descenso del desempleo. "Estamos ganando la batalla de la economía", ha dicho en su análisis el presidente del Gobierno. En los planes de Rajoy de que el PP incremente su presencia pública está también, de una forma diferenciada, Cataluña.

Como hizo este fin de semana en Barcelona, el jefe del Ejecutivo ha reiterado su disposición a dialogar con todo el mundo, aunque ha garantizado que la soberanía nacional, la unidad de España y la igualdad y los derechos de todos los españoles reconocidos en la Constitución no están sujetos a negociación. Además ha insistido en que seguirá cumpliendo con su obligación como presidente de los catalanes igual que del resto de los españoles y que no dejará a "ningún catalán tirado" mientras el "desgobierno" de la Generalitat no se ocupa de sus problemas, ha explicado Cospedal.

De nuevo, Mariano Rajoy ha defendido la inocencia de la ex ministra de Sanidad Ana Mato cuando se ha referido a su situación jurídica y ha recordado que el juez Pablo Ruz no la ha imputado en el caso Gürtel al incluirla como partícipe a título lucrativo, lo que significa que desconocía la comisión del delito. En la rueda de prensa, María Dolores de Cospedal ha asegurado por otra parte que no está entre las hipótesis del PP la de una gran coalición de gobierno con el PSOE. Aunque horas antes, en una entrevista en Telecinco, no ha descartado la posibilidad de un pacto para garantizar la gobernabilidad, Cospedal ha explicado que se trataba de una pregunta a una situación puntual que su partido no se plantea.