El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró ayer que no ve al vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, con suficiente "poso y sentido de Estado" para ser el candidato del PSOE en las elecciones generales de 2012.

Aunque reconoció que Rubalcaba "es muy bueno para muchas cosas", Rajoy negó que sienta temor por si el vicepresidente primero es su contrincante en las elecciones generales en lugar del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

En una entrevista en TV3, Rajoy aseguró que el debate sobre la sucesión de Zapatero no le concierne, y manifestó que su objetivo es explicar a los ciudadanos otra forma de hacer las cosas para salir de la crisis, para lo que, entre otras medidas, plantea la supresión de la Vicepresidencia Tercera, insertar el Ministerio de Cultura en Educación, y repartir Ciencia y Tecnología entre Educación e Industria.

Al ser preguntado si tendría más fácil ganar las elecciones si su rival fuese Zapatero, evitó pronunciarse pero señaló que el presidente "ha provocado la desconfianza de muchos españoles". El líder de los populares critica la sobrerregulación que, a su juicio, hay en España, y sostuvo que "sobran leyes, reglamentos y decretos" que dificultan el trabajo a los empresarios, que no pueden conocer tantas regulaciones.

Rajoy se refirió también a los recortes aplicados por el primer ministro británico, David Cameron, y defendió que, "a diferencia de lo ocurrido en España", el líder conservador ha dado prioridad a los recortes en los ámbitos en que debían acometerse pero ha aumentado la inversión en otras partidas estratégicas como pensiones, educación y sanidad.

También sobre política internacional, Rajoy comentó el ascenso del Tea Party en las elecciones en Estados Unidos, y descartó que ese fenómeno se reproduzca en España "porque lo que necesita ahora es más moderación y sentido común, menos ruido y menos gritos".

Por su parte, en un desayuno informativo en Madrid organizado por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, el vicepresidente tercero Manuel Chaves alertó de que una reforma del Título VIII de la Carta Magna, sería "un retroceso, una marcha atrás" en el Estado de las Autonomías. De hecho, "llama la atención la propuesta" de Rajoy para "reordenar y redimensionar el Estado autonómico", por lo que ha preguntado al principal partido de la oposición si está planteando una reforma de la Constitución y un "proceso de renacionalización de las competencias de las que son titulares ahora las comunidades autónomas".

En su opinión, este modelo autonómico ha sido "uno de los grandes aciertos" de la historia democrática española, pero considera que el PP "siempre se ha sentido incómodo" con él.

Chaves reconoció que el desarrollo de este modelo ha producido "disfunciones y duplicidades" que "es preciso corregir", para lo cual aboga por "la cooperación y la coordinación" entre las comunidades autónomas y el Estado.

El vicepresidente tercero del Gobierno pidió a los populares que "no se mantengan en la ambigüedad" y expliquen su propuesta de cara al futuro del Estado de las Autonomías. Para el ministro, "da la impresión" de que en el PP "prima más el prejuicio ideológico que las necesidades reales del país y de la propia salida de la crisis", algo que se pone de manifiesto cuando los populares anuncian una "agenda privatizadora de servicios públicos fundamentales, como la educación o la sanidad".