Sin el presidente del Gobierno valenciano, Francisco Camps, por "problemas de agenda". Así se celebró ayer el Comité Ejecutivo Nacional del PP en el que su líder, Mariano Rajoy, manifestó su apoyo y confianza ciegas en el líder valenciano e incidió en su libertad para actuar en los términos que considere oportunos a raíz de las últimas revelaciones del caso Gürtel que apuntan a una supuesta financiación irregular del PP de Valencia.

En la breve mención que dedicó al caso Gürtel en la reunión de su partido, a la que tampoco asistieron el vicepresidente del Gobierno valenciano, Vicente Rambla, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, Rajoy defendió su gestión ante las nuevas informaciones sobre el escándalo de corrupción que ha salpicado a su partido y, por ello, pidió a su formación que huya del "nerviosismo" porque "no hay que tomar decisiones precipitadas" al respecto, y destacó que en esta cuestión conviene mantener "la prudencia".

Rajoy recordó que cada cosa tiene su tiempo y también que Camps tiene plena libertad para actuar en los plazos que considere oportunos, según informaron fuentes asistentes al Comité Ejecutivo.

En parecidos términos se expresó después en rueda de prensa la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, quien señaló que la dirección nacional ya ha dicho estos días que Camps "tenía que actuar con toda la libertad y de la forma que considere más conveniente". Desveló también que con el presidente valenciano ha vuelto a hablar desde que el pasado lunes le pidiera "contundencia", según precisó ella misma. Conversaciones telefónicas que la número dos del PP enmarcó en la rutina de sus funciones, ya que habla con todos los presidentes regionales de su partido.

Mientras, el senador y presidente fundador del PP, Manuel Fraga, consideró que con el almuerzo discreto que reunió en un parador de Cuenca a Rajoy y Camps se trató de "ganar tiempo para resolver los problemas importantes" provocados por el escándalo Gürtel.

Al término del Comité Ejecutivo del PP, Fraga eludió responder si la dirección nacional de los populares está actuando adecuadamente ante este caso, si bien reconoció que la situación del PP valenciano "no da la sensación de que vaya muy bien".

Camps no tardó en responder a las palabras de Fraga. Preguntado por las declaraciones del presidente fundador del PP, el presidente valenciano indicó: "Don Manuel está encantado; yo hablo con él con mucha frecuencia y está encantado con el partido en la comunidad y en toda España". "Don Manuel está feliz con lo que está pasando", concretó.