Podemos y PNV manifestaron ayer su disposición a apoyar la proposición presentada por el PSOE en el Congreso para derogar la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley mordaza, aunque el primero espera que la iniciativa no se quede en un mero "golpe de titular" pues no se fía del Grupo Socialista.

Ciudadanos no es partidario de derogar la ley entera para no dejar un vacío legal, pero sí de reformar los preceptos que se han recurrido al Tribunal Constitucional, "porque siembran dudas sobre su carácter democrático por la posible extralimitación de facultades de las fuerzas de seguridad y que tengan capacidad represora basada en meros indicios y contra las garantías judiciales".

La proposición de ley socialista fue registrada el miércoles en el Congreso, al día siguiente de que el Pleno de la Cámara aprobara con el voto en contra del PP y la abstención de Ciudadanos una moción socialista que reclama al Gobierno la derogación de la ley, iniciativa que apoyaron Unidos Podemos, los partidos nacionalistas y la mayor parte de los integrantes del Grupo Mixto.

El PSOE empezará la próxima semana los contactos con todos los grupos parlamentarios, incluidos PP y Ciudadanos, para ir configurando una nueva ley, según anunció ayer en una rueda de prensa en Oviedo el portavoz socialista en la Comisión de Interior del Congreso, Antonio Trevín.

La propuesta socialista supone abolir las sanciones a las personas que participan en manifestaciones, a las que se manifiestan ante el Congreso y el Senado y a las que utilizan imágenes de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como derogar la posibilidad de que a los periodistas se les requise el material gráfico.