El PSOE ve cómo se acerca el 31 de octubre, fecha límite para la investidura del presidente del Gobierno o la disolución de las Cortes en su defecto, y apenas hay avances en su contrarreloj, ya que el Comité Federal que deberá decidir si cambia el voto en contra de Mariano Rajoy sigue sin fecha, aunque la palabra abstención sigue siendo tabú en Ferraz.

La única novedad de calado que expuso ayer en rueda de prensa el portavoz de la gestora, Mario Jiménez, tras su reunión en Ferraz fue la de los nombramientos del ex presidente asturiano, Vicente Álvarez-Areces, como portavoz en el Senado, y del ex ministro Ramón Jáuregui como presidente de la delegación en el Parlamento Europeo.

La gran sorpresa fue la ratificación de Antonio Hernando como portavoz en el Congreso.

Sigue en el aire el día en que se reunirá el Comité Federal, una fecha que "no está determinada", aunque "no tiene por qué ser en fin de semana", indicó Jiménez, que admitió que le "preocupa que se produzca con normalidad".

La herida de la traumática salida de Pedro Sánchez de la Secretaría General sigue abierta y los socialistas esperan que se calmen las turbulencias. Así, la gestora tampoco fue capaz de acordar ayer la convocatoria del Comité Territorial, donde están representados los secretarios generales de las federaciones, y que ya anunció la semana pasada su presidente, Javier Fernández.

A este respecto, Mario Jiménez señaló que la dificultad radica en que "hay presidentes que están fuera y otros tienen problemas de agenda", mientras que el PSC está inmerso en un proceso de primarias. No obstante, el portavoz de la gestora garantizó que si Fernández no puede consultar con los dirigentes territoriales en el marco de ese órgano, lo hará igualmente "con todos y cada uno" de ellos por separado.

Lo cierto es que los socialistas no acaban de espantar el fantasma de unas terceras elecciones. Pero ayer fue muy llamativo que el portavoz de la gestora se abstuviera de ahondar en la presunta corrupción del PP, que era el hilo conductor de la argumentación del PSOE de Pedro Sánchez para explicar su no rotundo a la investidura de Rajoy. Cuando se le preguntó ayer a Jiménez en la rueda de prensa en Ferraz por la información según la cual decenas de alcaldes populares habrían sido instruidos por el partido, a través de un power point, sobre cómo financiar irregularmente, el portavoz de la gestora no quiso extenderse demasiado y prefirió cargar contra Podemos. "Si esa noticia se confirma, evidentemente se volvería a confirmar que todo lo que ha ocurrido en el PP no ha sido cuestión de unos cuantos, sino que forma parte de una estrategia en la que la propia estructura del PP ha estado desde el principio", dijo el portavoz de la gestora, que arremetió contra Pablo Iglesias.

Para Jiménez, "es una obscenidad la actitud y la estrategia que viene siguiendo (Pablo) Iglesias y algunos dirigentes" del partido morado. "Es intolerable, una falta de respeto a las normas mínimas de convivencia entre formaciones políticas, una falta de respeto a las decisiones democráticas de los órganos de otras formaciones políticas y una estrategia burda de aprovechamiento que, quiero anticiparle a Iglesias, no le va a llevar a ninguna parte", insistió Jiménez.

A su juicio, el líder de Podemos "tiene un problema muy serio, incluso dentro de su propia organización porque cada vez hay más gente que se ha dado cuenta de que Iglesias ha tenido como obsesión, y esto sí lo ha conseguido, volar todos los puentes de entendimiento de la izquierda española".