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Indemnización sin precedentes a una víctima emocional de un atentado etarra

La Audiencia Nacional ha condenado a 17 años de cárcel a José Luis Erostegui, compañero de comando del fallecido Josu Uribetxerria Bolinaga, por asesinar al guardia civil sevillano Antonio Ramos Ramírez en la localidad guipuzoana de Mondragón el 8 de junio de 1986 y un hijo del agente será indemnizado por el trauma que le causó aunque no presenció el atentado.

La Sección Tercera de la Sala de lo Penal considera a Erostegui Bidagurren autor de un delito de atentado con resultado de muerte con la atenuante de dilaciones indebidas y le ha condenado a indemnizar a los herederos de la víctima con 500.000 euros y con 200.000 euros a su hijo por las lesiones sufridas como consecuencia de la experiencia traumática que padeció.

En este sentido, Pedro Mancera, abogado de la Asociación Andaluza Víctimas del Terrorismo, subrayó el carácter inédito de la resolución, "al reconocer como víctima a una persona que no estuvo en el atentado, aunque las secuelas que padece (trastorno límite de la personalidad) las declara consecuencia directa del asesinato de su padre". "Es la primera sentencia -agregó- que reconoce un hecho como éste y se le reconoce el derecho a indemnización conforme a la Ley 29/2011 de Protección a las Víctimas del Terrorismo.

Los magistrados consideran probado que Erostegui y Javier Ugarte Villarlos -al que absuelven por falta de pruebas- formaban parte del comando Bellotxa, que tenía entre sus funciones la comisión de atentados contra las Fuerzas de Seguridad y la creación de infraestructuras para llevar a cabo secuestros. Ambos fueron detenidos el 1 de julio de 1997 en la operación de la Guardia Civil que acabó con la liberación del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara. La Fiscalía solicitaba 29 años de cárcel para los tres miembros del comando, incluido Bolinaga, quien falleció el 16 de enero por un cáncer terminal.

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