El juez que investiga las cargas en la acampada de indignados de la Plaza Cataluña de la capital catalana ha citado a declarar como imputado al comisario del área policial de Barcelona Joan Carles Molinero, que dirigió el operativo desde la sala de mandos.

Según han informado fuentes judiciales, Molinero declarará el próximo 10 de febrero ante el titular del juzgado de instrucción número 4 de Barcelona, en relación con la querella que presentaron medio centenar de indignados por las cargas policiales del pasado 27 de mayo en la acampada de la barcelonesa Plaza de Cataluña.

El juez ha decidido llamar a declarar a Molinero de oficio, después de que Antoni Antolí, jefe del dispositivo de Mossos d'Esquadra que coordinó el operativo a pie de plaza, afirmara la semana pasada en su declaración como imputado que se limitaba a ejecutar las órdenes que recibía del responsable de la policía catalana en Barcelona desde la sala de mandos.

También el director de la policía catalana, Manel Prat, imputado en la causa, señaló ante el juez que Molinero fue quien ordenó a los Mossos d'Esquadra cargar con las defensas para controlar la situación en la plaza de Cataluña, que unas 2.000 personas cercaron para evitar el desalojo de la acampada de indignados.

Precisamente, Molinero acompañó a Antoni Antolín cuando éste acudió el pasado jueves a declarar como imputado ante el juez de instrucción, Josep Maria Miquel Porres. Además de la citación de Molinero, el juez instructor ha pedido al Departamento de Interior un informe con la transcripción de las conversaciones mantenidas entre la sala de mandos, en la que el máximo responsable era Joan Carles Molinero, y los mandos policiales a pie de calle, entre ellos Antolín.

En la causa abierta por la operación policial del pasado 27 de mayo en la plaza de Cataluña de Barcelona están imputados, además de Prat, Molinero y Antolín, la ex teniente de alcalde de Seguridad de Barcelona Assumpta Escarp y el jefe de los antidisturbios, David Bordas, que declarará mañana.

El director de la policía catalana asumió ante el juez la responsabilidad por el operativo y admitió que autorizó el disparo de las pelotas de goma, mientras aceptó la orden de cargar con las defensas que dio Joan Carles Molinero. Por su parte, Antolín se defendió ante el juez alegando que en la operación del pasado 27 de mayo se limitó a obedecer las órdenes que le venían de Molinero desde la sala de mandos que coordinaba el operativo y que la actuación de los agente fue correcta y acorde a los protocolos policiales.