El presidente del Congreso, José Bono, afirma que en una negociación como la del nuevo sistema de financiación autonómica, la posibilidad de no llegar a un acuerdo "no es el fin del mundo", y, si efectivamente esto ocurriera, "parece razonable" que prevalezca el criterio de la mayoría, del Gobierno.

El ex presidente de Castilla-La Mancha, cargo que ejerció durante veintiún años y que le ha permitido asistir a varias negociaciones sobre el modelo de financiación de las autonomías, recuerda en una entrevista que siempre, en cada proceso, y "hasta el último instante", "los presidentes autonómicos intentan llevarse el último centavo en favor de sus territorios".

El vicepresidente económico, Pedro Solbes, ha presentado ya una propuesta con las bases del nuevo modelo, pero la mayoría de las comunidades autónomas, así como los grupos políticos, la han rechazado.

A Bono, según reconoce, le sorprende "la alarma" que ahora han generado las reivindicaciones de las comunidades autónomas."Siempre ha sido así", recuerda.

Por ello, si al final se logra el acuerdo, será "digno de aplaudirse", pero si no lo hay, "no es el fin del mundo", ya que, como recuerda, uno de los Gobiernos de Felipe González encontró el rechazo de tres presidentes socialistas a su propuesta de nuevo sistema de financiación: Manuel Chaves (Andalucía), Juan Carlos Rodríguez Ibarra (Extremadura) y José Bono (Castilla-La Mancha).

Entonces, continúa Bono, "prevaleció el criterio del Gobierno central porque parece razonable que en democracia prevalezca la mayoría sobre la minoría".

Con todo, añade, es optimista sobre el desenlace de las conversaciones del Gobierno con las comunidades autónomas.

Sobre la influencia de las reclamaciones de Cataluña en el transcurso de la negociación, el presidente del Congreso indica que no puede olvidarse que se trata de un "territorio muy importante dentro de España por número habitantes, por la riqueza que añade al conjunto nacional, por su historia, y sobre todo, por su futuro".

Sin embargo, aboga por encajar todas esas reivindicaciones en el marco de la ley: "Lo que no cabe en la ley no puede caber en el modelo de financiación; el peso que tiene Cataluña y todas las demás regiones está definido en la ley y no caben ecuaciones de financiación distintas a las que están reguladas en las leyes", resume.

"Los sentimientos, las identidades, la historia, las emociones, son importantes, pero no pueden prevalecer contra las leyes, y el único imperio respetable en democracia -recuerda- es el de la ley".

Además, ante un hipotético voto en contra del PSC a los Presupuestos Generales del Estado de 2009, Bono afirma que no tiene al respecto "ninguna inquietud".

"Los socialistas sabemos muy bien que nuestros escaños no nos pertenecen individualmente, por nuestros méritos personales; al contrario, somos diputados porque militamos en un partido y el líder, el presidente Zapatero, tiene bastante más que ver en nuestras actas de parlamentarios que los dirigentes o gobiernos regionales".

Bono insiste: "Somos diputados de un partido antes que de un territorio; nuestra identidad como socialistas se define porque compartimos un proyecto de solidaridad más que por haber nacido aquí o allá; militamos con unas ideas que están por encima de las fronteras, y si nos empeñamos en ver el mundo por el ojo de una cerradura, necesariamente lo veremos pequeño y deformado.".