Este periódico ha recibido nuevas quejas de usuarios de trenes por no poder acceder a los andenes con normalidad. En este caso, la denuncia proviene de unos portuenses que acompañaron a unos familiares mayores (76 años) para tomar el tren de altas prestaciones de las 8.35 de la mañana que llega a El Puerto con destino Córdoba. Los viajeros llegaron a la estación con sus equipajes a las ocho y cinco de la mañana, comprobando que había una gran cola de público que aguardaba el ascensor para bajar al túnel subterráneo que conecta la terminal con los andenes. Decidieron entonces bajar por las escaleras mecánicas, pero no funcionaban, por lo que tuvieron que acceder al subterráneo por las escaleras de mampostería. Una vez en el túnel comprobaron que las cancelas de acceso a los andenes estaban cerradas y que multitud de personas se concentraban en el pasillo apelotonadas. Los viajeros, muchos de avanzada edad, se vieron encerrados en el subterráneo de acceso con sus equipajes, vivienda momentos de temor y claustrofobia, empujando contra las cancelas a los que estaban pegados a ellas, que llegaron a temer por su integridad. En un momento determinado algunos comenzaron a tratar de abrir las verjas a empujones. Sólo cuando el tren llegó al andén vacío, a las 8.35 minutos, un funcionario ferroviario abrió la cancela metálica y los viajeros subieron en tropel las escaleras para acceder al tren, que los esperó mientras embarcaban tras largos minutos de angustia.