La Plataforma vecinal de la Zona Norte ha solicitado una reunión con la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, para conocer qué planes maneja la administración andaluza con respecto a la construcción de un nuevo centro de salud en la ciudad, en concreto en la zona de La Florida.

En un panorama adverso en el que los recortes en las administraciones públicas están a la orden del día, y con el presidente de la Junta de Andalucía alertando de un posible cierre de hospitales y colegios en la comunidad autónoma, los vecinos tienen claro que a pesar de la lucha que han llevado a cabo, y que se remonta a una década atrás, en estos momentos es prácticamente imposible que el gobierno andaluz apueste por impulsar este proyecto. No obstante, quizás porque la esperanza es siempre lo último que se pierde, los vecinos aseguran que no vana tirar la toalla y que seguirán con su lucha para que la ciudad opte por fin a contar con este esperado recurso.

El portavoz de la plataforma, Enrique Valle, explicó a este periódico que a través de la diputada gaditana Raquel Arenal, del PSOE, tratarán de mantener un encuentro con María Jesús Montero después del verano, para que esta les traslade el orden de prioridad que ocupa el proyecto del nuevo centro de salud portuense en la agenda de la Junta. "Somos muy conscientes de la situación actual y sabemos que en estos momentos no se va a destinar ni un euro a este proyecto, pero también sabemos que habrá un momento en el que la situación remonte, y es entonces cuando tenemos que estar preparados para exigir de nuevo la reanudación del proyecto, y eso dependerá de las prioridades que se haya marcado la Junta", explica.

Enrique Valle recuerda el penoso camino que se ha tenido que recorrer hasta ir solventando los numerosos obstáculos que presentaba el proyecto de La Florida, primero porque el Plan Parcial de la zona no estaba aprobado y después porque cualquier trámite, desde la transmisión de la parcela al SAS hasta la redacción del proyecto, se alargaba hasta el infinito por la pesada burocracia en la que se mueven las administraciones públicas.

Ahora, cuando ya por fin el proyecto estaba terminado y la licencia de obras se había concedido, los problemas económicos amenazan con echar al traste todo el trabajo realizado.

"Nos gustaría que la consejera de Salud diera la cara y nos explicara los planes de su departamento para la ciudad, sería lo menos que puede hacer después de tantos años de reivindicaciones", expresó Enrique Valle, para quien quizás la lucha llevada a cabo desde el año 2003 ha carecido también en muchos momentos de un mayor apoyo popular.

El portavoz de la plataforma lamenta que en estos años atrás "se ha tirado mucho el dinero" y pone como ejemplo que de los cuatro centros de salud que funcionan en la ciudad, dos de ellos son alquilados, de manera que el SAS está destinando a este fin una serie de recursos que se podría haber ahorrado si hubiera construido sus propias instalaciones cuando las 'vacas gordas' así lo permitían.