La plantilla municipal de la limpieza protagonizó ayer una protesta ante el Ayuntamiento, para hacer ver pública la falta de negociación con la empresa concesionaria, FCC, a la hora de organizar el servicio tras la entrada en vigor del nuevo contrato y la puesta en marcha de la nueva maquinaria adquirida.

Y es que de momento, a pesar de las presentaciones a bombo y platillo de la nueva maquinaria, lo cierto es que ni los nuevos camiones de recogida ni las bicicletas de los barrenderos están en uso, y lo que es peor, el obsoleto material con el que trabaja la plantilla no se repara.

Los trabajadores mantuvieron un encuentro primero con los concejales de Izquierda Unida Antonio Fernández y José Luis Bueno, y posteriormente con el alcalde, David de la Encina, para trasladarles la situación y pedir su mediación ante la empresa.

Los trabajadores tienen prevista otra concentración para el jueves y el viernes se reunirán de nuevo con los responsables municipales para ver si ha habido algún avance en la mediación municipal.

Los trabajadores se quejan de que la ciudadanía les culpa del estado de suciedad que presenta buena parte de la ciudad, con numerosas bolsas fuera de los contenedores en múltiples puntos del término municipal. Ellos consideran que el problema es la falta de medios con la que cuentan en la actualidad, así como una mala organización del servicio tras la firma del nuevo contrato, que ha modificado los sistemas de trabajo.

Por su parte el concejal de Medio Ambiente trasladó a la plantilla su apoyo y el del gobierno municipal y se comprometió a abordar este asunto en la próxima comisión de seguimiento de la limpieza urbana.