La crisis desatada a nivel local en el Partido Andalucista (PA) no ha sido recibido de igual forma por todos los militantes de dicho partido. Existe una toma de posiciones claras entre los partidarios del cabeza de lista en las pasadas elecciones municipales, Carlos Coronado, por una gran parte; y los afines a la vieja guardia del PA, es decir los más próximos al aparato del partido, alineados con el secretario nacional, Antonio Jesús Ruiz Aguilar, y el secretario local, Daniel Neto.

La baraja se ha roto dentro del andalucismo local y la onda expansiva ha tenido gran repercusión mediática, especialmente después de la comparecencia de anteayer en el hotel Monasterio, donde 13 militantes (ocho de ellos pertenecientes a la lista electoral) y el propio concejal Carlos Coronado anunciaron que se darán de baja en el PA y que muchos militantes les imitarán en los próximos días. El concejal reiteró que no dejará el acta, como le pide el comité local del partido.

El cisma está servido, y el espíritu de la división amenaza de nuevo a la militancia andalucista en El Puerto. Pero en la ruptura de la baraja del andalucismo, no se conocía aún la opinión de María Antonia Martínez Valera, la persona que ocupa el segunda lugar en la candidatura electoral de Carlos Coronado. Ella estaba llamada a sustituirle en caso de que el concejal hubiera atendido la orden del comité local de renunciar a su acta. Pero Coronado ha declinado la invitación de sus antiguos compañeros y ha decidido mantener el acta, a pesar de las consecuencias económicas y políticas que tendrá para los andalucistas y para él mismo, que pasará de formar parte del Grupo Mixto a ser un verso suelto en el Pleno, al tener que asumir la condición de concejal no adscrito.

Coronado manifestó anteayer en la rueda de prensa que ofreció que Mª Antonia Martínez Valera solicitaría también la baja en el partido en estos días.

Pero la exconcejala de Patrimonio Histórico tiene el corazón dividido entre la amistad que le une a su antiguo compañero de grupo municipal, Carlos Coronado, y al secretario nacional del PA; Antonio Jesús Ruiz Aguilar. Así lo expresó ayer a este periódico: "Aprecio a Carlos y a Antonio Jesús y los considero de mi familia. Cuando surgió el problema, les dije a ambos que los problemas se solucionan en casa. No me he ido a ningún sitio y la decisión que tome -respecto a seguir o no en el PA- será personal".

La exconcejala mantiene la equidistancia entre los dos bandos enfrentados: "Estos son problemas que hay que solucionar dentro del partido y no voy a entrar en declaraciones. Lo estoy pasando mal", reconoció. Coronado la propuso en el comité local que ha generado esta crisis como secretario de grupo frente a la persona nombrada por la vieja guardia del partido, pero ella ha optado por la discreción: "De momento estoy en casa y no entro en una parte ni en otra. Yo no me he dado de baja en el partido, yo lo que dije es que me iba a mi casa porque esta situación es muy incómoda, y que me quedaba al margen", De esta forma, la decisión que tome Martínez Valera "será mía, y se producirá cuando pasen las vacaciones; ahora necesito relajarme". La exconcejala reitera que tanto Coronado como Ruiz Aguilar "son dos personas a las que aprecio" y opina que "estas cosas no benefician a nadie y hay que solucionarlas internamente; lo único que pido es que se pongan de acuerdo y que lo arreglen. Yo ahora tengo la misma distancia de uno y de otro", concluye.