El pleno ordinario que se celebra en la mañana de hoy en el Ayuntamiento abordará en su orden del día la declaración de caducidad y archivo del procedimiento de aprobación del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) que afecta al Palacio Winthuyssen, ubicado en la calle Larga, y que había sido impulsado por la entidad mercantil Bateun 2000 SL.

La propuesta que presenta el concejal de Urbanismo, Diego Muñoz, da por cerrado el expediente iniciado en mayo del pasado 2008 por la empresa promotora, que en un principio tenía previsto rehabilitar el inmueble (y otros solares anexos que se habían añadido al proyecto) para darle un uso hotelero.

El Plan especial fue presentado por la empresa en el mes de mayo de 2008 y en agosto de ese mismo año ya fue informado desfavorablemente por el servicio de Planeamiento y Gestión Urbanística. En septiembre se le requirió al promotor el pago de la tasa municipal por la tramitación del PERI, con la intención además de consensuar un documento que pudiera ser aprobado. Tras un nuevo aviso en marzo de 2009, hasta la fecha la empresa no ha atendido al requerimiento municipal, por lo que Urbanismo decide ahora declarar caducado el expediente, dando así por finalizado el procedimiento.

En el citado inmueble, una impresionante casa palacio con un gran jardín, la sociedad Bateun 2000 pensaba levantar un hotel de cuatro estrellas con 92 habitaciones. El proyecto ya viene de antiguo y se venía hablando de él desde el año 2000, aunque no fue hasta el año 2008 cuando la sociedad promotora inscribió el proyecto en el Registro de Turismo de Andalucía, un requisito necesario para la puesta en marcha de un nuevo establecimiento hotelero.

Según informaron en su día desde la promotora, incluso habían recibido el visto bueno de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía, estando previsto ejecutar el proyecto por fases, primero rehabilitando la casa palacio y después levantando edificios de nueva construcción en torno al jardín, así como un aparcamiento bajo rasante.

Ahora, con la crisis económica azotando fuerte al sector inmobiliario, parece que los planes para rehabilitar el edificio tendrán que seguir esperando. Para colmo, la eterna rehabilitación pospuesta del inmueble mantiene una de las aceras de la calle Larga (en la esquina con Espíritu Santo) cerrada al tráfico desde hace años, sin que nadie le ponga remedio.