Las personas que estaban este domingo en el restaurante Sotavento, a la entrada del paseo marítimo de Puerto Sherry, se encontraron con una desagradable escena protagonizada por un perro full terrier. El perro, de raza potencialmente peligrosa, y que deambulaba solo por el paseo marítimo sin bozal ni correa, atacó a otro perro pequeño que paseaba junto a un padre y su hija. Al percatarse de la situación, el padre trataba de poner a salvo a la mascota tirando hacia arriba de la correa para alejarlo de las mandíbulas del full terrier, que pese a ello conseguía saltar y morderle una y otra vez, sin que el desconcertado progenitor lograra evitar la agresión al perrito de su hija. Desde el restaurante, los clientes veían alarmados cómo el peligroso animal asía en el aire una y otra vez al pequeño perro y parecía desgarrarlo, hasta que un cliente improvisó una correa con su cinturón y consiguió reducirlo con una oportuna intervención. Al cabo de varios minutos, la Policía Local se llevó al agresivo perro, cuyo dueño no apareció, y que es uno de los muchos que van sin bozal por Puerto Sherry.