Los responsables del comedor social de Sol y Vida, ubicado en la calle Cruces, están preocupados ante la ola de intenso frío que está afectando a toda Europa y que se prolongará durante todo el fin de semana. Ante la presencia de varias personas sin techo que acuden a diario al centro, y conscientes de que pasan las noches a la intemperie, la directiva de la entidad está buscando recursos para alojar a estas personas en algún hostal o pensión para evitar que pasen las peores noches de frío en la calle. La entidad afrontará este gasto con medios propios, utilizando parte de los recursos que destinan al funcionamiento del comedor, con el que estas últimas navidades colaboraron muchos portuenses a título particular.