-Éste será el segundo Pregón que ofrecerá en la ciudad de una fiesta portuense, ¿qué sintió cuando El Olivo lo llamó?

-Es muy curioso porque cuando ellos me llaman no me dicen para qué es, sino que se quieren reunir conmigo. Me llaman en Cuaresma. Entonces, es cierto, que cuando una hermandad te llama en Cuaresma te imaginas que es para algún trabajo relacionado con la Semana Santa. El que me llamó fue Francis Dueñas, que ha sido pregonero de la Semana Santa, y me dice: "Ya vamos tarde". Se me pasó, de tanto que le da uno vueltas a la cabeza porque se pone a pensar, que una de las posibilidades fuera esa, que la tenía como muy remota. Y sí, estoy muy ilusionado.

-¿Ha sido más un orgullo que una responsabilidad?

-La responsabilidad está ahí, está clarísimo, porque por ejemplo, tú das más pregones a hermandades o entidades y son cosas más pequeñas porque no representan a la ciudad entera. Esto te pasa como en el de Semana Santa, te pesa la responsabilidad porque tienes que gustarle a mucha gente. Lo que encuentro de diferente es que la Feria es más distendida que la Semana Santa. En la Semana Santa tienes que llegar al sentimiento de la gente y aquí no hace falta llegar a eso, aquí es el vender tu Feria.

-El año pasado fue Enrique Miranda el pregonero y orientó su intervención hacia el mundo de la interpretación, ¿usted lo orientará hacia el suyo?

-Pinceladas de mi trabajo tiene. Evidentemente uno hace su Pregón mirándolo desde la primera persona. Tanto la Semana Santa como la Feria van muy ligadas, son las fiestas de primavera. De hecho, casi todas las hermandades tienen caseta de Feria. A la gente que le gusta la Semana Santa casi en un 80 ó 90% le gusta la Feria. Estéticamente son fiestas que van muy de la mano. Arranco el Pregón desde mi punto de vista cofrade para adentrarnos en la Feria. Pinceladas tiene que haber, es obvio, porque es mi profesión... También supongo que es lo que espera un poco la gente de mí, va ir mucha gente a verme que son cofrades.

-Entonces, ¿el estilo Calleja será reconocible?

-El Pregón va a ser muy Calleja, está clarísimo. Pero va a ser muy Calleja feriante, que no es una versión que conozca tanto la gente. Sí es cierto que el Pregón está dividido en cuatro capítulos muy marcados y los cuatro son muy diferentes, incluso en la manera de interpretarlos. Quiero que el primero sea como una transición entre el paso de la Semana Santa a la Feria. Habrá partes que intentaré que sean más simpáticas, más distendidas. Hago cosas que en otros pregones no he hecho ni voy a hacer nunca. No creo que de muchos más pregones de Feria, porque yo lo doy en la Feria de El Puerto porque es mi Feria. Me he permitido la licencia de enfocarlo con cosas que en la Semana Santa no puedo hacer.

-¿A quién ha elegido para que le presente mañana ante la ciudad?

-Me presenta Concha Rodríguez, ella es sevillana. Pensé en ella porque como el Pregón va dedicado a Sevilla, quería que fuera una persona de esa ciudad. Con Concha me unen muchos lazos, es una persona muy especial para mí. Colaboramos juntos en su fachada donde monto el Corpus. Ella tiene una tienda dedicada a lo que son los borlones, los encajes... en la calle Francos. Además, es una tienda centenaria, que celebró el centenario en el 2013, una tienda con mucho empaque en Sevilla. En el momento en el que me dijeron que la Feria iba dedicada a Sevilla, yo quería que fuera una persona sevillana.

-Siendo usted asesor artístico de cofradías, ¿los exornos estarán bien configurados?

-Me pasa un poco igual que en el de Semana Santa, no me preocupa la decoración del Pregón. Puede ser como raro. En el de Feria no me preocupa porque quiero que el protagonista del Pregón sea lo que tú vas a contar y la gente que va a participar, no en sí el escenario. Voy contando una historia en cada capítulo y sería complicado llevar tanto atrezzo y tanto decorado para capítulos que duran como mucho no más de diez minutos, no es factible. Por eso llevo tanta gente en el Pregón, para que me ayude. Sí lo hago más a través de la escenografía, cuento con gente que, aparte de que vayan a desarrollar el arte que vayan a desarrollar, interpreten algo, que haya una historia de fondo.

-Si va a estar acompañado en el escenario, ¿la música tendrá un protagonismo especial?

-Sí, además yo soy muy de sevillanas. Soy un fanático de las sevillanas y me gustan muchísimo, bueno, de las sevillanas y de las coplas, todo va unido. Va a ver un poco de todo. Todas las sevillanas que se van a interpretar, casi todas, son antiguas, porque son sevillanas mías de toda la vida que me han encantado. Me gusta mucho el punto de las sevillanas como el baile de sevillanas.