En la mañana del lunes se formó un cierto revuelo en el Poblado de Doña Blanca a causa de un local social en desuso desde hace meses. Dicho local, que en un principio fue cedido por el IARA a los vecinos, pertenece al patrimonio municipal desde el año 1991 y se le entregó para su utilización a una asociación juvenil de la zona. Al parecer el local se encuentra en mal estado y no se utiliza desde hace algún tiempo. Una vecina solicitó su utilización a la Concejalía de Patrimonio y al no poder localizar la llave, según el Ayuntamiento, los técnicos del área acudieron a inspeccionar la sede con un cerrajero que forzó la cerradura, en presencia de la Policía Local, que levantó acta. Los vecinos se tomaron mal esta decisión y acusaron al Ayuntamiento de actuar sin consultarles.

Ya ayer la directiva de la asociación de vecinos El Castillo se reunió con la edil de Patrimonio, Leocadia Benavente, para abordar este asunto y se acordó que se realizará un informe técnico sobre el estado del local y sus necesidades de mejora para definir posteriormente la utilización que se le podrá dar a estas dependencias.