El Puerto de Santa María vuelve a tener servicio de grúa, después de más de un mes sin el mismo tras la marcha de la anterior empresa, a la que el Ayuntamiento debía dinero.

La concejala de Seguridad, Marina Peris, explica que este contrato menor es provisional, en tanto se  redacta y se aprueba el nuevo pliego de condiciones para adjudicar el servicio, por un periodo de cuatro años.

Por su parte ex-trabajadores del servicio de grúa han denunciando que cuatro de los cinco que conformaban la anterior plantilla se han quedado en el paro, al ser despedidos antes de que se pudiera contratar  la nueva adjudicación, que hubiera supuesto su automática subrogación.

De los cinco trabajadores solo permanece uno, a la sazón familiar de un Policía Local, según explican los ya ex-empleados, que denuncian que de los dos nuevos  que se han sumado al servicio, también uno de ellos tiene lazos con la Jefatura.

Marina Peris afirma tajantemente que en la reunión que mantuvo con la actual empresa pidió a sus responsables que contasen con la anterior plantilla, aunque finalmente solo uno de ellos está trabajando. Como dice la edil, se trata de una empresa privada y el Ayuntamiento no puede decidir los contratos, aunque la empresa no se ha traído a sus trabajadores de Sevilla sino que finalmente ha hecho nuevas contrataciones en El Puerto.

Los ex-trabajadores no entienden cómo se ha encargado de esta contratación un agente de la Policía Local, que ha tramitado el expediente, en lugar del área de Contratación. Esta circunstancia, según ellos, se presta a una menor fiscalización a la hora de evitar posibles casos de enchufismo.

Marina Peris, que se reunió también con los ex-trabajadores, afirma que de cara al nuevo contrato pedirá de nuevo que se cuente con ellos, tres de los cuales son portuenses. 

Hay que señalar que dos de estos trabajadores ahora despedidos ya tuvieron un despido anterior al reclamar sus derechos laborales, despido que se declaró improcedente y tuvieron que ser readmitidos. Los ex-trabajadores achacan en parte su no incorporación a la empresa a un intento de echar por tierra la representación sindical con la que contaban.

La adjudicataria de este contrato menor, la empresa sevillana SSG,  se dedica en general al sector de las ambulancias, aunque desde hace un año aproximadamente cuenta también con una grúa que es la que prestará ahora el servicio. También señalan que había otras empresas locales interesadas en este contrato menor, pero que se han descartado también por amiguismo.

La anterior plantilla recuerda que para esta labor, además, hay que tener unos conocimientos específicos y una formación de la que según ellos, carecen algunos de los nuevos empleados.

Los ex-trabajadores están muy dolidos con la gestión de este asunto del alcalde, Germán Beardo, y la concejala de Seguridad, de la que echan en falta una mayor implicación en este asunto. "Cuatro familias nos hemos quedado en la calle por su mala gestión", lamentan.