La coordinadora de asociaciones de vecinos de viviendas ilegales (Coave) está promoviendo la organización de una "asamblea" en la que pretende reunir a propietarios de los diseminados irregulares, responsables políticos y representantes de otras entidades (como la Flave o Ecologistas en Acción). Con este debate lo que se pretende es buscar una "vía de diálogo" entre todas las partes para consensuar políticas y resolver las carencias de estos desarrollos urbanísticos que se encuentran al margen de la ley.

No hay una fecha ni un emplazamiento fijado por el momento ya que se pretende acordar entre todas las partes para una mayor asistencia. Entre los temas a tratar en esta asamblea se encontraría la situación actual de estos diseminados. A día de hoy, y a pesar de las intenciones de ambas partes, no es posible legalizarlas y, por tanto, no se les puede autorizar los suministros de luz y agua. Desde el Área de Urbanismo se han buscado fórmulas legales de manera infructuosa. La única vía posible, por el momento, es la de esperar al nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para la regularización de estos núcleos (y al nuevo ordenamiento se le estima que no podrá entrar en vigor hasta dentro de dos años, como mínimo). Mientras esto no se cumpla, tampoco se podrán realizar obras de urbanización en estos diseminados. Otra de las cuestiones serían las sanciones urbanísticas impuestas a los propietarios por construir ilegalmente. El Gobierno Municipal se planteó inicialmente paralizar los expedientes sancionadores de aquellas viviendas que podían ser regularizadas. Sin embargo, informes técnicos apuntaron que esta posibilidad era inviable. Los expedientes sancionadores siguen su curso, por tanto.

Los procesos judiciales y sancionadores abiertos contra propietarios cuyas parcelas invaden partes de vías pecuarias y la implantación del servicio de recogida de basura en estos núcleos serían también otros de los asuntos que se pretende incluir en el 'orden del día' de este encuentro entre todas las partes implicadas.