La plantilla de los autobuses urbanos protagonizó ayer un nuevo paro parcial de tres horas en el servicio, entre las siete y las diez de la mañana, dentro del calendario de reivindicaciones que protagonizan en demanda de mejoras laborales. Para mañana viernes está convocado el último de los paros parciales ya que a partir de la próxima semana el comité de empresa ya ha acordado que las movilizaciones pasarán a ser de 24 horas, con paros previstos para los días 13, 17, 24 y 31 de marzo.

Por otro lado los sindicatos de Transportes de UGT y Comisiones Obreras emitieron ayer un comunicado conjunto en el que quisieron aclarar que no se puede acusar a la plantilla del servicio de autobuses de los ataques que sufrieron los vehículos el viernes de la pasada semana, al tiempo que dejaron "meridianamente claro" que no comparten esos ataques. La empresa concesionaria, por su parte, no ha dado la cara hasta ahora al menos ante este medio, que ha recabado su punto de vista en varias ocasiones. Los sindicatos de transportes instan a la empresa a negociar el acuerdo planteado al tiempo que piden al Ayuntamiento que ejerza su papel de mediador de forma decidida, de forma que con su intervención se pueda llegar a resolver el conflicto.