Unión Portuense ha tendido la mano al gobierno municipal, ofreciendo su experiencia en la tramitación del presupuesto 2021, con la intención de ayudar en todo lo posible a la concejala Blanca Merino en su configuración y dejando a un lado "el bochornoso espectáculo del supuesto borrador de 2020 que nunca existió. Es momento de ser humildes y que el alcalde, Germán Beardo, reconozca su incapacidad para elaborar dicho documento", señalan desde la formación.

Este ofrecimiento no es nuevo, Unión Portuense ya lo hizo al principio de mandato con Javier Bello, el anterior concejal de Economía destituido recientemente. "Lo hicimos de nuevo durante el estado de alarma y lo volvemos hacer con la nueva incorporación al área económica de Blanca Merino, con vistas a trabajar en el borrador del presupuesto 2021. Es bien reconocida la experiencia de nuestro portavoz y concejal Javier Botella donde en 2015, a los pocos meses de entrar en gobierno como teniente de alcalde del Área Económica, configuró el presupuesto de 2016", recurdan, siendo este el  último presupuesto en ser presentado y aprobado en tiempo y forma.

Unión Portuense quiere destacar que sus  prioridades de cara al futuro "pasan por trabajar en otros dos documentos que van de la mano del presupuesto, tales como la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y el Plan de Ajuste. Sin este trabajo previo en recursos humanos, un futuro presupuesto puede quedar en papel mojado. La aprobación de unas cuentas municipales es vital ya que el presupuesto es la herramienta principal que tiene un ayuntamiento cada año para determinar la planificación, la programación, el control, el seguimiento y la evaluación de las actuaciones municipales. Pero sin una política correcta en recursos humanos es imposible ejecutar de manera eficiente un presupuesto", advierten.

También añaden que "somos conscientes de que los problemas de personal han aumentado en los últimos años y por ello queremos ofrecer dicha ayuda técnica. Estamos ofreciendo un gesto de unidad, tan demandado en estos tiempos convulsos, a la par que una muestra de apertura y transparencia por parte del gobierno ante la opacidad y polémicas suscitadas durante estos dieciséis meses de mandato".