Las setas, al final, acabarán siendo aceptadas. Éste era un pronóstico del gobierno de Alfredo Sánchez Monteseirín, refrendado por algunos ex munícipes que vaticinaban lo mismo, y ya empieza a ser una realidad, según refleja el sondeo realizado por la empresa Commentia para el Grupo Joly. En los últimos dos meses la valoración de los sevillanos sobre el polémico Metropol-Parasol ha cambiado, para mejor, y ya son más de un tercio, el 34,6% exactamente, quienes consideran positiva la nueva imagen de la plaza de la Encarnación. Esta tendencia supone un aumento de diez puntos, si bien lo más significativo es el porcentaje de sevillanos contrarios y críticos con el proyecto del alemán Jürgen Mayer, que ha bajado más de 16 puntos. Aun así, la mitad de los sevillanos siguen considerando negativa esta obra de arquitectura vanguardista.

El cambio se ha constatado después de que el nuevo espacio de la Encarnación se haya abierto al público. La inauguración, que se produjo a finales de marzo de manera apresurada después de casi cuatro años de retraso, no sólo ha generado mayor expectación ciudadana sino que, en pocas semanas, ha supuesto una revaloración de la zona y ha multiplicado el volumen de negocio del comercio del entorno hasta en un 50% cuando todavía quedan espacios por abrir al público, como el Antiquarium, las galerías comerciales y el restaurante panorámico.

Todos estos aspectos podrían explicar la mejor valoración de las setas que, según el anterior sondeo realizado por Commentia, era el proyecto peor valorado de los últimos años en Sevilla. De hecho, el suspenso era general: el proyecto era mal valorado por más de dos tercios de los sevillanos e incluso considerado muy negativo para la mitad de los encuestados, también entre los votantes del PSOE y, casi en una misma proporción, por los de IU.

En esta ocasión, la encuesta sólo se ha centrado en la valoración de los votantes socialistas y populares y, no es ninguna sorpresa, las diferencias son abismales. Así, la opinión de quienes votan al PP acerca del Metropol-Parasol sigue siendo muy negativa: más del 54% así lo considera, no obstante, también son menos con respecto a la encuesta realizada dos meses atrás, en la que esta valoración subía a casi el 70%. Aun así, los simpatizantes del candidato Juan Ignacio Zoido que aplauden sin ningún reparo el proyecto son nulos, si bien en febrero había un 1,3% que declaró que las setas eran muy positivas para Sevilla.

A pesar de ello, la cercanía de las elecciones municipales ha suavizado las críticas, que ya no son tan radicales puesto que el porcentaje de votantes del PP que ahora ven bastante positivo el proyecto se ha multiplicado por cuatro después de haber visto la Encarnación libre de andamios y grúas. El proyecto estrella que cierra el mandato de Alfredo Sánchez Monteseirín también agrada ahora más a los socialistas. De hecho, el porcentaje de votantes del PSOE muy críticos con el Metropol-Parasol se ha reducido a la mitad y hoy hay un 40% más de entusiastas.

La nueva Encarnación ha tenido una fuerte contestación social, al igual que ocurrió con el blindaje del casco antiguo a los vehículos privados, que se puso en marcha con fuertes críticas y poca información y en poco más de dos meses obtuvo el aprobado, según quedó patente en la primera encuesta realizada por Commentia, que recogió que más de la mitad de los sondeados veían positiva la medida. Esta valoración del Plan Centro sorprendió, al igual que ahora lo ha hecho la de las famosas setas.

En ambos casos, la oposición del PP a los proyectos ha sido importante. El candidato ha llegado incluso a plantear derogar el plan de tráfico y, en el caso de la Encarnación, antes de que finalizase la obra, sugirió dejarla inconclusa para abaratar costes y también redefinir sus usos. Por ahora, la crítica a las setas sigue siendo más radical y, en este último sondeo, ocho de cada diez votantes del PP consideran todavía negativo un proyecto que sólo poco más de uno de cada diez apoya.