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Elecciones municipales

El afán privado le gana terreno al público en el parque natural

  • Tuvo que ser el proyecto de un ingeniero, y no una iniciativa municipal, el que pusiese en valor los últimos terrenos vírgenes gaditanos

  • Las propuestas van desde la ampliación del espacio protegido con las dunas hasta la construcción de palafitos para jóvenes

Ninguno de los Ayuntamientos que se han sucedido durante la democracia ha sido capaz de aprovechar el enorme potencial de los siete kilómetros cuadrados incluidos en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz de los que dispone uno de los términos municipales más densamente urbanizados de todo el país.

Desde Cortadura a Río Arillo, a lo largo de todo el istmo y en los manchones y salinas de Dolores y Santibáñez, se extiende otro Cádiz natural, virgen y abandonado durante décadas, que está llamado a convertirse en el pulmón verde de un territorio colmatado que lo necesita con urgencia. Ha tenido que ser la iniciativa privada de un ingeniero isleño la que rescate gran parte de ese patrimonio ecológico único que son las Salinas de Preciosa y Roqueta para la creación allí de un ambicioso complejo ambiental y de producción acuícola que avanza firme, pero con la lentitud que le imponen las tres administraciones implicadas.

Sólo al filo de la legislatura ha sido cuando el equipo de Gobierno ha decidido llevar a Pleno el proyecto en el que Héctor Bouzo lleva ya trabajando año y medio y en el que ha invertido mucho más de los 10.000 euros que le costaron las diez hectáreas de la finca y el derecho de uso de otras 40 hectáreas de salinas.

El proyecto salió adelante con el apoyo de todos los grupos municipales, previa introducción de algunas modificaciones en el planteamiento original. En este punto cabe calificar de sorprendente que se haya demorado tanto cualquier tipo de movimiento respecto a este territorio tan prometedor en un equipo de Gobierno sustentado por unas formaciones políticas que cuentan con varios asesores de reconocida trayectoria en la gestión, la reivindicación y la comunicación ambiental desde la óptica ecologista.

Pero, ¿qué es lo que proponen los diferentes partidos que concurren a las próximas elecciones municipales? Comencemos por Adelante Cádiz, que curiosamente no hace mención expresa al proyecto privado aprobado en el Pleno y respaldado en el último minuto de la legislatura por el actual equipo de Gobierno.

Incluir las dunas (AC)

La confluencia de izquierdas propone “solucionar el desconocimiento de la población” de este territorio incluido en el espacio protegido, “resaltando el enorme valor ecológico de esta tercera parte del término municipal, recuperando las salinas Roquetas y Dolores y rehabilitando el molino de Río Arillo”. Además, plantean la promoción de actividades sostenibles, como la acuicultura extensiva, la actividad salinera y el ecoturismo”, todas ellas incluidas en el proyecto de Bouzo.

Como novedad, Adelante Cádiz aporta “la inclusión en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz del sistema dunar, playa y plataformas rocosas, entre Cortadura y Torregorda”. La confluencia concluye que este “ámbito constituye en sí mismo un interesante sistema playa-duna en buen estado de conservación, que merece su inclusión en el parque natural, ya que en él tienen presencia varios hábitats de interés comunitario de carácter prioritario”.

Viviendas pilotadas (PP)

El Partido Popular, por su parte, arranca en su propuesta con la mejora de accesos, rutas y señalización de lo que denominan Parque Periurbano de la Bahía, con zonas de ocio allí donde los permita su protección. A esto añaden la promoción de actividades relacionadas con el senderismo, los deportes náuticos sin motor y la observación de fauna, como motores de un turismo verde y ambiental. Tampoco los populares citan el proyecto privado que también respaldaron en pleno y que incluye este tipo de actividades.

Obviamente, también defienden desde el PP la rehabilitación para uso y disfrute de los gaditanos de la Salina Dolores, de propiedad municipal , y el Molino de Mareas de Río Arillo. Y concluyen con un viejo proyecto popular que parece chocar con el resto de su propuesta: la construcción a la entrada del parque natural, pegada a la Zona Franca, de una urbanización “moderna y respetuosa con el medio ambiente” de viviendas pilotadas, a modo de palafitos, destinadas a jóvenes.

Centro de interpretación de Ciencias del Mar (PSOE)

Los socialistas son los únicos que citan expresamente el proyecto de las salinas Preciosa y Roqueta bajo un modelo de gestión privada, que también proponen para la Salina Dolores y el Molino de Río Arillo, donde planean la implantación de un Centro de Interpretación sobre Ciencias del Mar, una vez rehabilitado. En cualquier caso, los socialistas son partidarios de definir el modelo de gestión con el fin de asegurarse la financiación necesaria.

Desde el PSOE recuerdan que llevan años defendiendo “una propuesta muy concreta para dar a estos lugares un uso recreativo, de ocio, deportivo, de investigación y cultural, mediante distintas actuaciones, como la construcción de senderos para peatones y ciclistas”.

También abogan por la recuperación de las antiguas casas salineras, la construcción de un atraque para embarcaciones deportivas y la creación de una zona de avistamiento y observación astronómica. Lugares de esparcimiento con actividades que generen empleo es, en definitiva, la fórmula que defienden los socialistas.

Autobuses ecológicos, ‘centro de los vientos’ y ‘ruta del agua’ (C’s)

Desde Ciudadanos proponen hacer accesible el parque natural mediante la creación de una nueva línea de autobuses ecológicos que recorra todo el término municipal, previo acondicionamiento de la vereda paralela a la Bahía, que serviría también para el uso de senderistas y ciclistas. Plantean, además, un servicio de alquiler de bicicletas, incluidas las eléctricas.

Pero lo más novedoso es el proyecto de creación de un “centro de interpretación y aprendizaje de los 25 diferentes vientos gaditanos y su incidencia en la industria salinera”. En él se mostrarán todas las especies animales propias de la Bahía mediante visitas y actividades concertadas con touroperadores y centros escolares.

En Santibáñez ven un centro de piragüismo y navegación deportiva y proponen la construcción de un parque de triatlón. Por último, plantean la apertura a toda la ciudadanía de las edificaciones históricas (el polvorín, las fortificaciones, el cuerpo de guardia y el molino de mar del Siglo XVIII) y una ‘Ruta del Agua’ que explique el recorrido del antiguo acueducto romano, así como “el peculiar pozo-noria de agua dulce que surge en el entorno salino de la marisma”.

Rehabilitar edificios para usos históricos (Alter)

Desde Alternativa Republicana argumentan la necesidad de recuperar los edificios que conforman la arqueología salinera del parque natural para darles un uso relacionado con el mismo. Entre ellos citan, claro, el Molino de Río Arillo y la casa de la Salina Dolores. “Una vez recuperados deberían servir para realizar actividades ambientales y talleres de productos derivados de la sal y acoger muestras relacionadas con la etnología de la zona e interpretación del parque”.

En paralelo alientan el fomento del conocimiento de este espacio protegido y sensibilizar sobre su importancia, protección y uso público. Otra actuación sería mejorar el sendero que conecta Cádiz con San Fernando, que va paralelo a la vía del ferrocarril, así como llevar a cabo el proyectado por costas entre Torregorda y San Fernando. En la Salina Dolores ven una intervención no invasiva que facilite su visita y el tránsito. En cualquier caso, el recorrido por el parque debería limitarse a peatones y ciclistas.

Este periódico solicitó a Vox sus propuestas, pero más allá de manifestarse como “un partido que apoya al mundo rural”, no aportó ninguna.

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